Ni el niño payés Miquel Montoro, ni Tomeu Penya, ni la Mucha de Sineu (aunque ha habido referencias a todos ellos). No, el pregonero del Cosso de Felanitx de este año ha sido precisamente uno de los precursores de la antigua peña taurina reconvertida a puramente festiva, Tomeu Estelrich, quien ha demostrado sus dotes de orador y arengador de las más de mil personas que han llenado la plaza de s'Arraval.

Un despliegue de imaginación al servicio de los más madrugadores, en el que al ritmo de las canciones Sobreviviré y de la reivindicativa Viva Puigdemont al son 'xeremier', precedieron la llegada de la mascota del Cosso, la Quica (una pequeña gallina disecada) y unas cuantas pancartas alusivas al retraso en la reforma del Sindicat o la que mentaba a la exalcaldesa de la ciudad y hoy senadora, Catalina Soler, con el polémico lema 'Gora CarraixEta'.

El pregón de Estelrich ha estado plagado de recuerdos de la constitución de la peña, en el Sant Agustí de 1983, de la actualidad política, del rey, de la manada y del hecho de ser 'felanitxer'. "Ni sa Mucha, ni en Tomeu Penya ni es ninet Montoro... es pregoner som jo i això és el Cosso!!", ha finiquitado encorbatado y entre aplausos.

Minutos después y tras la interpretación algo libre del himno de Felanitx, una gran traca ha dejado sordo a más de uno y llenado de humo la plaza de s'Arraval.

El otro plato fuerte del dia será la misa en el Convent y la posterior salida de autoridades bajo el Palio del Cosso.