Alrededor de unas 150 personas se han concentrado este domingo en la playa del Ratjolí para manifestarse en contra de la ampliación del pantalán del pequeño puerto de Costa dels Pins, en el municipio de Son Servera.

Para hacer patente su contrariedad a las obras han realizado unos largos desde la playa hasta el embarcadero situado a unos trescientos metros.

Entre los asistentes se encontraban vecinos de Son Servera y algunos venidos de pueblos vecinos y de Palma. Antes de la partida se oyeron cánticos que reivindicaban "es Ratjolí no se toca".

El portavoz del movimiento vecinal, Antoni Palerm, ante la nota emitida el sábado por Delegación de Gobierno, anunciando que no tramitaba ningún expediente para la ampliación del puerto, manifestó: "Costas ha recibido el proyecto de ampliación, si lo están tramitando o no, no tengo ni idea, ahora sí que en mayo de 2017 recibieron un proyecto de ampliación y antes de que esto salga adelante queremos hacerlo público".

La concentración estuvo vigilada en todo momento por la Policía Local tanto desde tierra como desde una embarcación situada en la aguas des Ratjolí.

Entre los asistentes había quienes echaron a faltar un posicionamiento claro del equipo de gobierno del consistorio serverí, dirigido por Independents y PSOE, sobre si está a favor o en contra de este proyecto, considerando insuficiente la nota emitida por el Ayuntamiento (Diario de Mallorca ya informó en su edición del pasado sábado)de, en la que alude a una conversación telefónica en la que se les informa que Costas no tramita el expediente y desmarcándose seguidamente del proyecto y de la organización de la manifestación.

Cabe explicar que la Asociación de Usuarios del Embarcadero de Punta Rotja solicitó en 2017 la ampliación del pantalán (la concesión no expira hasta el año 2039). Dicha petición no obtuvo entonces respuesta y, por ello, Delegación del Gobierno en Balears subrayó este pasado sábado que ahora no se tramita nada al respecto, de hecho "la dirección general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, no tramita la ampliación de ningún muelle en el municipio de Son Servera", recalcó.

La infraestructura objeto de controversia cuenta con 42 amarres. Un elevado número de ciudadanos temen que el proyecto de ampliación del pequeño puerto de la urbanización afecte a la cala de es Ratjolí, frecuentada tanto por vecinos de Son Servera como de otros municipios cercanos.