Subsanado el error de comunicación entre Carreteras y la Guardia Civil, ayer la carretera del faro de Formentor recuperó la tranquilidad, según informó el alcalde del municipio de Pollença, Miquel Àngel March, municipio al que pertenece Formentor.

March explicó que "la jornada del lunes resultó caótica debido a que por algún error se levantó la barrera que impide el acceso a vehículos particulares y sucedió que entraron turismos. Cuando la carretera está llena de coches pequeños los autocares tienen muchas dificultades y por eso se saturó", pormenorizó el máximo responsable del Ayuntamiento.

El faro de Formentor se llenó este lunes de coches durante toda la jornada pese a las restricciones circulatorias para vehículos que se pusieron en marcha el pasado día 9 de julio. Un "problema de comunicación" del Consell de Mallorca hizo que la Guardia Civil considerase que podía retirar la barrera provisional que impide el paso en temporada alta a los coches, según informaron fuentes de Delegación de Gobierno.

Sin embargo, continuaron explicando estas fuentes, el sistema definitivo del control del tráfico aún no se ha instalado, de tal forma que, por ahora, seguirá instalada esa barrera provisional.

El colapso circulatorio en el entorno del faro de Formentor que se vivió durante buena parte de la jornada por la afluencia de vehículos motivó que no circulasen los buses lanzadera que ha habilitado el Govern con salidas desde la nueva estación del Moll pollencí y la playa de Formentor.

A lo largo del día, las redes sociales se llenaron de comentarios críticos de usuarios denunciando que la inexistencia de controles de acceso, lo que, protestaban, causaba colapsos circulatorios en este entorno idílico de la costa mallorquina.