La asociación ecologista Gob ha criticado hoy al Govern por declarar de utilidad pública la construcción de un nuevo parque de energía solar fotovoltaica de 50 hectáreas en la Marina de Llucmajor y le ha acusado primar el interés energético sobre la preservación del medio ambiente.

"La posición de (la conselleria de) Medio Ambiente de evitar la protección como ZEPA de la zona central y más valiosa de la Marna para no interferir en los proyectos fotovoltaicos es altamente irresponsable", indica el Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (Gob) en un comunicado.

Los ecologistas señalan que con el proyecto avalado ayer por el Govern ya hay 75 hectáreas de esta zona "afectadas" por iniciativas de generación de energía con placas solares y casi 3.000 están amenazadas si no se preservan como Zona de Especial Protección para las Aves.

Inciden en que "la Marina de Llucmajor es un magnífico espacio agroforestal de miles de hectáreas que afortunadamente ha conseguido sobrevivir hasta ahora a la transformación del mundo rural que ha sufrido Mallorca", y es un hábitat importante para una especie en peligro de extinción como el milano. "Esta es la gran asignatura pendiente en la protección territorial de Mallorca", resalta el Gob.

El Consell de Govern aprobó ayer la declaración de utilidad pública de la instalación Parque Fotovoltaico de Cap Blanc, en el término municipal de Llucmajor, de 42 megavatios (MW) de potencia, un trámite necesario, según los ecologistas, porque el planeamiento urbanístico de Llucmajor no permite este tipo de infraestructuras en la zona por ser "agrícola ganadera en zona de protección paisajística y ecológica".

En esta línea, hoy mismo, en redes sociales, el Gob ha remarcado: "Sí a las renovables, pero no sacrificando espacios excepcionales". En Mallorca, además de con este proyecto de megaparque en plena Marina de Llucmajor, existe gran controversia especialmente con el proyecto también de megaparque en la finca de Santa Cirga de Manacor.