Platja de Muro es el nombre oficial, aprobado por el pleno, que recibe la zona costera del municipio. Lo que hace años era una zona idílica y casi virgen, pues cabe recordar que es la última de los tres grandes municipios de la bahía de Alcúdia que se ha desarrollado, ahora se ha vuelto un lugar densamente transitado en verano, especialmente los fines de semana. Tanto es así que urbanísticamente ha tocado techo, como reconoce el propio alcalde, Martí Fornés.

El estacionamiento se ha vuelto algo muy difícil ante la gran afluencia de visitantes a su playa, calificada por algunas webs especializadas como de las mejores de España. Junto a ello cabe destacar que hay muy pocos solares por edificar y sólo en suelo residencial, pues no queda ya ni un sólo solar turístico donde levantar un hotel más. El Ayuntamiento considera que la población en verano ronda los 20.000 habitantes. Eso supone casi triplicar la población del propio pueblo de Muro. Dispone de unas 17.000 plazas turísticas y alrededor de 3.000 residenciales.

Los solares que quedan disponibles tienen ya calificación de urbanos y no existe posibilidad de hacer ninguna modificación del planeamiento para aumentar ninguna plaza más.

Tráfico

Eso se ha traducido en una saturación evidente y desesperante para más de un conductor que circule por la travesía que cruza el lugar desde Alcúdia hasta Can Picafort; y también, en que aparcar en fin de semana sea una aventura casi imposible. Es tanta la afluencia de vehículos que más allá de las 10 de la mañana de un sábado o domingo no quedan lugares libres más que en calles muy de segunda línea. El alcalde dice que es imposible crear plazas de aparcamiento porque no quedan solares y no es posible una circunvalación porque el núcleo se encuentra rodeado por los parques naturales de es Comú y de s'Albufera.