El ayuntamiento de Santanyí ha reaccionado con rapidez y está haciendo efectivo el borrado de los tres grandes grafitis fluorescentes con mensajes en alemán que recientemente aparecieron en las rocas de sa Punta Negra, entre el faro del Cap Salines y la paradisíaca playa del Caragol. El presupuesto necesario para ello asciende a unos 3.000 euros.

La acción vandálica, informada por DIARIO de MALLORCA el pasado 1 de julio, ha sido objeto de muchas críticas. La Associació per a la Rehabilitació dels Centres Antics (ARCA) condenó estas pintadas: "Estas acciones vandálicas no se pueden contemplar como una expresión artística, debido a que son un atentado contra el Patrimonio Natural".

Hoy por la mañana, el alcalde de Santanyí, Llorenç Galmés (PP), y el jefe de la demarcación de Costas en Balears, Carlos Simarro (PP), se han desplazado al lugar. Galmés ha calificado lo sucedido como "trágica noticia", mientras que Simarro se ha referido a los actos vandálicos como "barbaridades", lamentando que se afecte gravemente al "patrimonio común". Por ello ambos dirigentes han reclamado "civismo" y que se respete la costa y el patrimonio público.

Debido a la dificultad para llevar al escenario en cuestión sistemas-maquinaria especializada en la eliminación de pintadas de este tipo, la limpieza y el acondicionamiento se llevan a cabo manualmente, con cepillos, disolventes y decapados.

La empresa encargada es Mitra Restaura. Miquel Vidal ha mostrado hoy cómo se realiza el borrado y ha augurado que las tareas precisarán en torno a una semana.

Tanto Galmés como Simarro han agradecido a la propiedad de s´Avall las facilidades dadas (acceso directo a la zona a través del camino de s´Avallet).

Bañistas curiosos han observado con curiosidad la presencia de políticos y cámaras de televisión, así como el meticuloso proceso de borrado.