La asociación de usuarios del tren expresó ayer su malestar por las "continuas reclamaciones" que recibe contra la política tarifaria del transporte ferroviario y el "mal funcionamiento" de las tarjetas. Critican que, en caso de robo o pérdida de las tarjetas, los usuarios se quedan sin el saldo que tenían en la tarjeta, además de pagar ocho euros por un nuevo documento. La asociación insta a SFM a aplicar la misma política que la empresa EMT en los casos de pérdida de tarjetas.