Las paradas de bus de Marratxí siguen en estado precario. En noviembre el Ayuntamiento anunció la licitación de las obras para la reforma y mejora de un total seis paradas de autobús en el municipio por importe de 61.000 euros. En marzo de este año las obras fueron adjudicadas a la empresa Sincronización Técnica S. L. por un importe de 64.668 euros. El 11 de abril se firmó el contrato de adjudicación para el inicio de las obras, con un plazo de ejecución de seis meses.
Sin embargo, han transcurrido tres meses desde la fecha de la firma del contrato y las paradas de bus continúan igual, debiendo los usuarios aguantar las inclemencias del tiempo, sol en verano y lluvia y frío en invierno. Ningún equipo de gobierno ha solventado este problema de falta de protección para los usuarios del bus.
Según fuentes consultadas del Ayuntamiento, el motivo de que todavía no se hayan iniciado las obras es debido a que la empresa adjudicataria de las mismas debe subsanar unas deficiencias en el plan de seguridad presentado al Consistorio. En la mañana de ayer la empresa presentó en el Ayuntamiento el plan de seguridad con las deficiencias resueltas y se espera que en la próxima semana se inicien las obras en las correspondientes paradas.
Mejora de seis paradas
De las seis paradas que deben mejorarse, cuatro corresponden a los autobuses del TIB que prestan servicio en el municipio, mientras que otras dos son de los buses escolares de Es Caülls y Es Garrovers. En estas paradas no será necesaria la ejecución de una obra muy ambiciosa, ya que la anchura de las aceras es suficiente.
En las paradas de sa Cabana y la de la calle Constitució de Pòrtol, ambas correspondientes al servicio del TIB, tampoco serán necesarias obras de gran calado que afecten el tráfico, aunque la situación es distinta en las paradas de las calles Albert Castell y Antoni Jaume de Pòrtol, donde está ubicado el colegio Costa i Llobera.
Así, en la calle Albert Castell la actual parada se verá desplazada unos metros y se realizará un saliente en la acera, ya que la misma no tiene la anchura necesaria para la marquesina, siendo de 7,97 metros en la parte de la acera y de 5,80 metros en la calzada, creándose un espacio para la parada del bus. La nueva parada estará situada entre la nueva ubicación del Espai Jove y un solar sin edificar.
En la calle Antoni Jaume la actuación será mayor y se unirán las paradas del bus en sentido a la estación del tren y la del sentido de regreso a Pòrtol. La actuación obligará al traslado de los contenedores que ocupan la confluencia de la calle Antoni Jaume y la carretera de sa Cabaneta a Pòrtol.
