La falta de personal encargado de la recogida selectiva de residuos durante todo el fin de semana en el municipio de Llucmajor ha provocado la aparición de numerosos puntos negros donde se ha ido acumulando una gran cantidad de basuras.

Una circunstancia que los vecinos, tanto de la ciudad como de las urbanizaciones han denunciado, por los malos olores y porque algunos de esos restos han ido a parar a sus casas a causa de las rachas de viento. Aunque algunos reconocen también una falta manifiesta de civismo.

Según el consistorio llucmajorer el problema se debe a varios factores. En primer lugar a la falta de efectivos por parte de la empresa encargada del servicio, consecuencia directa de la marcha de trabajadores, que han ido para desempeñar otras tareas de temporada.

Lo que ha hecho que este fin de semana las imágenes hayan sido insostenibles, y el Ayuntamiento haya tenido que acudir a empleados de la brigada municipal, que durante estos días prestarán su ayuda para vaciar en lo posible los puntos de recogida selectiva.

El otro factor es el aumento que la acumulación de estas basuras durante los meses de verano, que hace que las cantidades recogidas se multipliquen por dos en muchos casos y zonas.

El teniente de alcalde de Llucmajor, Bernadí Vives, confirmaba ayer que durante los próximos días el consistorio aprobará un nuevo pliego de condiciones que intentará subsanar estos problemas.