La 'Nit de vins' que cada año celebra Son Servera en la Església Nova fue el preludio a la festividad de su patrón, Sant Joan Baptista. Siete pequeños cellers de productores mallorquines dejaron catar sus caldos a centenares de personas. Mientras que ayer, la tradicional ofrenda de la agrupación folklórica Sa Revetla, el concierto de la Banda en la plaza y la velada de ball de bot cerraban los actos de la diada patronal.