La iluminación del túnel de Formentor cada vez está más cerca. El empresario suizo residente en Mallorca Max Hürzeler, con intereses en el mundo del cicloturismo, se ha ofrecido a pagar la mitad de la instalación lumínica del túnel con el objetivo de que se arregle cuanto antes por su "peligrosidad". "Según he calculado, no serían más de 20.000 euros", comenta Hürzeler, quien asegura que aún no ha recibido respuesta por parte del Consell. Es el único túnel de Mallorca que carece de iluminación artificial.

"Circular por el túnel de Formentor en bicicleta es muy peligroso, porque está muy oscuro y cuando estás en el centro no ves la salida", explica Hürzeler, quien añade que "es muy fácil tener un accidente, y más si eres extranjero ya que no conoces la carretera". "Desesperado" al ver que el tiempo pasa y "las instituciones no hacen nada", Hürzeler, con una laureada carrera en el ciclismo en pista en la década de los ochenta, propuso al Consell pagar parte de la instalación. Lo hace, porque cree que no puede haber carreteras así "de peligrosas" en la isla. "Recibo diariamente muchas quejas por parte de turistas", indica Hürzeler, a lo que agrega que "no les falta razón". Por ello, Hürzeler reclama que "se arregle ya".

También lo hace la Federació de Ciclisme de Balears. "Llevamos desde que se abrió el túnel pidiendo una iluminación adecuada", manifiestan. Y, aunque el Consell de Mallorca afirmó el pasado mes de marzo que sólo les faltaba la autorización de Medio Ambiente para poner en marcha el proyecto, la espera se les hace "eterna".

Federació de Ciclisme

Una reclamación "de toda la vida". Así describen la situación desde la Federació de Ciclisme de Balears, desde la que señalan que hay ciclistas que, conociendo la peligrosidad de esa zona, instalan en sus bicicletas un pequeño faro para cruzar.

"Es un punto muy peligroso por la falta de iluminación", declaran. Aunque reconocen que no es el tramo de la isla con más accidentes de ciclistas, aseguran que los incidentes han sido múltiples durante décadas porque "no se ve nada". El último siniestro tuvo lugar el pasado marzo.

Con solo unas horas de diferencia, dos ciclistas resultaron heridos al cruzar por el túnel de Formentor. Uno de ellos, un extranjero de 50 años, sufrió lesiones muy graves en la cara y la cabeza al estrellarse contra la pared.