Desde hace unos días, una de las puertas que da acceso al segundo nivel de la torre del Homenaje del castillo de Alaró, también conocida con el topónimo de 'Constipador', se ha abierto por razones desconocidas, dejando al descubierto una gran cantidad de escombros de obra y otros restos que provocan un gran impacto visual en la construcción histórica.

Al parecer, según explicó ayer a este diario el máximo responsable de la fundación del castillo, Mateu Marcús, los restos de obra fueron abandonados allí por los operarios de la dirección insular de Patrimonio del Consell, institución que hace unos años ejecutó en este mismo espacio del conjunto obras de rehabilitación para frenar el grave deterioro de la vieja torre del castillo.

Marcús aseguró que la fundación se pondrá en contacto estos días con la dirección insular de Patrimonio para reclamar la limpieza del lugar, ya que, según subrayó, este trabajo no es una competencia ni de la fundación ni del ayuntamiento de Alaró.