La fiesta estudiantil programada para mañana sábado por la noche tendrá mucha vigilancia policial. El Institut de Seguretat Pública de les Illes Balears (ISPIB) ha coordinado un dispositivo de control compuesto por policías tutores y agentes de la Guardia Civil que tratarán de controlar que los menores "no se excedan" en el consumo de alcohol.

El Govern calcula que unos treinta agentes serán los encargados de velar para que la fiesta transcurra sin incidentes. El de este año es el octavo plan de despliegue de policías tutores con motivo de esta fiesta que cada año congrega a varios miles de estudiantes de institutos ubicados en diferentes comarcas de la isla.

Los agentes irán vestidos de paisano y patrullarán de forma conjunta con los miembros de la Guardia Civil especializados en menores.

Diferentes municipios

Según explicó ayer el Govern, los policías tutores encargados de vigilar la fiesta pertenecen a los municipios de Alcúdia, Pollença, sa Pobla, Muro, Santa Margalida e Inca.

"La tarea de los agentes será la de asegurarse que los menores no se excedan en el consumo de alcohol", apunta el ISPIB.

Como novedad de este año, los agentes podrán decidir si retiran las bebidas alcohólicas a los participantes en la fiesta que sean menores de 18 años. También podrán ser identificados por los agentes con el objetivo de enviar una notificación a los padres o a los tutores legales para que "adopten medidas".