La utilización masiva de toallitas húmedas en los hogares de Sóller está provocando que la acumulación de fibras y tejidos en las tuberías del alcantarillado como consecuencia de averías por atascos, bloqueos y roturas internas por calentamientos.

Esto fue lo que ayer el alcalde de Sóller, Jaume Severa, quiso mostrar junto al concejal de Medio Ambiente, Josep Lluís Puig, y Cristina Forteza, la responsable de Aqualia, la empresa que se encarga del servicio municipal de aguas, que presentaron la campaña que van a poner en marcha para promover conductas responsables.

El Ayuntamiento y Aqualia piden la colaboración ciudadana para evitar este tipo de problemas; "con el simple gesto de tirar estas toallitas o cualquier otro residuo a la papelera, se mejoraría sensiblemente la problemática descrita y redundaría en el buen funcionamiento de las infraestructuras hidráulicas de Sóller, así como de las propias instalaciones particulares de los vecinos", explicó el alcalde.

El mensaje de la campaña, "El inodoro, nunca como papelera", se difundirá a través de banners, comunicación a través de la factura del agua, inserciones publicitarias y carteles en los baños de los hoteles del municipio. A través de estas herramientas se advertirá de las consecuencias negativas de arrojar residuos al inodoro tales como toallitas, aceites o fármacos.

Cristina Forteza, de Aqualia, mostró a pequeña escala por qué arrojar toallitas al inodoro resulta totalmente contraproducente para la red de saneamiento, ya que no se descomponen en contacto con el líquido como la celulosa de la que está hecha el papel higiénico. En dos cubetas llenas de agua metió toallitas y papel higiénico respectivamente y tras removerlo varias veces mostró cómo el papel higiénico se desmenuzaba, mientras que las toallitas permanecían inalteradas, a pesar de que en todos los envases de este tipo de producto se indica que se pueden desechar por el inodoro.

El Ayuntamiento y Aqualia pusieron así de manifiesto su preocupación por mejorar la calidad del servicio prestado y en relación a las toallitas recordaron que una conducta responsable es clave.