Calvià pidió ayer acabar con las mafias que prostituyen a las mujeres de una vez por todas. El alcalde de la localidad, Alfonso Rodríguez Badal exigió a quien vaya a ocupar el máximo puesto en la delegación del Gobierno de Balears, y a quien vaya a ser nombrado ministro o ministra del Interior, que "sean más sensibles y conscientes de que la única manera de terminar con esta situación es atacar la raíz del problema de forma enérgica, acabando con las mafias que son el auténtico origen de los conflictos creados".
El ayuntamiento de Calvià insistió en la necesidad de que la delegada del Gobierno intensifique su implicación e incremente, de forma real, el dispositivo de la Guardia Civil en el municipio, precisamente para prevenir conflictos y evitar que deriven en situaciones de mayor gravedad.
En este sentido, el alcalde de Calvià destacó que reiterará esta petición al nuevo o nueva delegada del Gobierno. Rodríguez Badal lamentó que, a día de hoy, aún no se ha producido ninguna respuesta a la carta que envió el pasado miércoles 30 de mayo el consistorio.
Precisamente ayer la Mesa de atención a las personas que ejercen la prostitución en Calvià (Mapcal), presidida por la teniente de alcalde de Cohesión Social e Igualdad, Nati Francés, se reunió con la Red de atención a las personas que ejercen la prostitución en Palma (Xadpep), encabezada por el regidor de Juventud, Igualdad y Derechos Cívicos, Aligi Molina, a la que también asistió la directora insular de Igualdad, Nina Parrón, para hacer una puesta en común ante la situación que se está produciendo en la zona de Punta Ballena y que trasciende más allá de lo local, ya que se trata de mafias que someten a mujeres, a las que explotan y extorsionan, y que, debido a su actuación se pone en riesgo la convivencia en la zona.
