La decisión del ayuntamiento de Calvià de aceptar la zonificación provisional realizada por el Consell para el municipio ha ocasionado las críticas de los partidos de la oposición, que temen que el alquiler residencial sea el gran perjudicado, aunque difieren sobre las medidas a aplicar.

La zonificación establece que Palmanova, Magaluf, Peguera y Santa Ponça son localidades saturadas, por lo que se permite el alquiler un máximo de 60 días al año tanto en viviendas unifamiliares como en plurifamiliares. El portavoz del Grupo Popular, José Manuel Ruiz, expresó su preocupación al considerar que, "al poner tantas restricciones" a alquilar en estos núcleos, "esa demanda se desviará a zonas residenciales, como Son Ferrer o Son Caliu".

"Se trasladará la presión a esas zonas. Lo que defendemos es que hay que minimizar esto y flexibilizar el alquiler vacacional en las zonas maduras, siendo más permivos. La convivencia del uso residencial y del vacacional constituye nuestra principal preocupación", argumentó Ruiz.

"La solución más cómoda"

Desde Esquerra Oberta de Calvià (EOC), su portavoz, Alfonso Rodríguez Sánchez, lamentó que el gobierno municipal socialista haya optado "por la solución más cómoda" aceptando la zonificación.

"Apoyamos la restricción, en especial en zonas residenciales como Son Ferrer o la urbanización Galatzó. Para garantizar el derecho de acceso a una vivienda que tienen los residentes, en especial en el ámbito del alquiler, EOC presentará en el pleno varias iniciativas", manifestó.

Por su parte, el edil de Sí Se Puede, Fernando Alcaraz, argumentó que, "si no se establece una normativa uniforme, la especulación se desplazará a las 'zonas liberadas' sin resolver el problema de fondo", al tiempo que pidió restricciones al alquiler turístico "al 100%" en localidades como Son Ferrer y Galatzó.

Zonas "al margen de la 'fiebre'"

La regidora no adscrita, Isabel Manresa, se mostró también partidaria de "preservar el alquiler residencial" y de, por tanto, "proteger las zonas que actualmente todavía se mantienen al margen de la fiebre del alquiler vacacional y que la zonificación propuesta por el Consell permitía dejar abiertas". "Aceptar abiertamente y sin mayores restricciones este tipo de alquiler puede repercutir muy negativamente en el precio de los alquileres residenciales", dijo

Por su parte, el regidor de Ciudadanos, Carlos Tarancón, arremetió contra la "zonificación tan restrictiva" que ha realizado el Consell para el municipio de Ponent. "Lo único que va a traer son consecuencias negativas, pues las zonas declaradas como 'no saturadas' sufrirán un incremento notable de demandantes de alquiler turístico en detrimento del alquiler de larga duración regulado por la LAU, convirtiendo zonas tradicionalmente residenciales como Son Ferrer, Son Caliu o Galatzó en zonas destinadas al alquiler turístico con los problemas de especulación que ello genera", señaló.