La comisión informativa del Consell de Mallorca adjudicó ayer, con la unanimidad de todos los grupos políticos, la construcción del desdoblamiento de la carretera que une los municipios de Llucmajor y Campos por 27,4 millones de euros. A diferencia de las aprobaciones de otros grandes proyectos viarios, en esta ocasión ni Més, ni especialmente Podemos, se desmarcaron del PSIB-PSOE, que tuvo que echar mano de la oposición para impulsarlos, y los podemitas incluso votaron a favor de la adjudicación, entre otras cosas porque estaba incluida entre los acuerdos de gobernabilidad. El Consell confía en que, si no hay recursos, las obras puedan iniciarse dentro del próximo mes de julio.

La empresa adjudicataria de la construcción es la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por COPISA y Aglomerados Felanitx. La mercantil se ha hecho con la concesión de las obras en pugna con otras 15 constructoras y rebajando el proyecto de los 32 millones de presupuesto de licitación fijado por el Consell hasta los 27,4 millones de la adjudicación final, IVA incluido.

Hay que tener en cuenta que el proyecto de desdoblamiento de la carretera entre Llucmajor y Campos sufrió modificaciones importantes para rebajar su impacto con la entrada en el Consell del pacto de izquierdas. Entre otras cosas, cambiaron los viales de servicio que pasan a ser caminos de servicio. De esta forma reducen su anchura en unos tres metros con respecto al proyecto inicial. De igual modo, la mediana prevista la pasada legislatura en algunos tramos llegaba a los 10 metros de anchura y ahora no superará los tres metros. También se suprimen rotondas en altura y la actual carretera pasará a formar parte del desdoblamiento, ya que antes se reconvertía en algunos tramos en vial de servicio.

En los próximos 15 días se notificará la decisión a las empresas participantes en el concurso público y, en caso no haber recursos, en julio se podrían iniciar las obras, ya que se dará 1,5 meses a la adjudicataria para iniciar la construcción de la autovía.

El periodo de construcción se calcula en 22 meses y el Consell tiene previsto que el movimiento de tierras se inicie en los laterales y, así, durante el verano las obras no afectarán a la enorme intensidad de tráfico. Es una de las carreteras más peligrosas de Mallorca debido a su alta siniestralidad. Por este motivo se decidió desdoblar los 8,8 kilómetros y reformar la entrada de Campos.

237 accidentes en 10 años

La media de vehículos diarios de esta carretera es de 22.019 y entre 2005 y 2016 se sucedieron un total de 237 accidentes. Uno de los principales problemas de la vía son las entradas a caminos rurales y carriles secundarias, que ahora se resolverá con pasos subterráneos. Estas entradas son las que originan la mayoría de accidentes. En los 237 siniestros se han producido 204 heridos y 19 víctimas mortales en 10 años.