El continuo crecimiento de habitantes en el municipio de Marratxí ha hecho aumentar el número de parques infantiles hasta un total de 42; unos dotados con arena y otros con caucho. Para el mantenimiento y limpieza, el consistorio ha contratado los servicios de la empresa Urbina por un importe de 160.000 euros anuales. A pesar de ello, los usuarios se quejan de la falta de limpieza y principalmente de los excrementos de perro que no son retirados por sus propietarios, igualmente algunos solicitan el cambio de la arena por caucho.
Esta petición ha generado un debate de opinión, pues otros usuarios prefieren que los parques estén dotados de arena ya que es más ecológica. Esto hace difícil que el Ayuntamiento pueda satisfacer las demandas de todos los usuarios.
Más limpieza
Los parques que han recibido mas quejas son el de la plaza de Can Barceló, de es Pla de na Tesa; y el situado en la calle Camí de Can Frontera, cerca de la calle Weyler. Usuarios explican que "la limpieza puede mejorar" pero se quejan principalmente de grupos de jóvenes que "por la tarde se reúnen en las zonas de juego e invaden las mismas, perjudicando a los mas pequeños". Les gustaría más vigilancia por parte del consistorio.
El parque de la plaza donde se celebra el mercado en sa Cabana, una de las madres que suele llevar a su hijo, comenta que "por lo noche es cuando aparecen excrementos de perro, pues los propietarios en lugar de recogerlos los entierran con la misma arena, y que al día siguiente los niños se ensucian las manos al desenterrarlos. Otros vecinos denuncian el consumo de drogas blandas en el parque de es Pla de na Tesa, concretamente en el parque situado cerca del centro sanitario Martí Serra.
En el parque de Son Ramonell, existe una pista para poder jugar, y a las doce del mediodía del sábado estaba limpia; una pareja con sus hijos comento que era la primera vez que acudían a esta pista y la encontraban limpia, y también ratificaron que "si las cosas están sucias es debido al incivismo y a la mala educación de los usuarios, ya que prefieren echar el papel al suelo antes que buscar una papelera para depositarlo".
En el parque de es Campet de sa Cabaneta, un grupo de usuarios defiende que se mantenga la arena en el mismo, ya que la prefieren al caucho. Comentan que en Alemania los parques infantiles tienen tierra.
Control
Resumiendo las conversaciones mantenidas con los padres, todos ellos llegan a una única conclusión: los parques están sucios por el incivismo de los propietarios de los perros y por grupos de jóvenes que les dan una utilidad que no es la que corresponde.
La concejal de Medio Ambiente, Cristina Alonso, indica que "es muy difícil conseguir que los propietarios recojan los excrementos, ya que cuando ven a la policía si lo hacen. Las multas van de 60 a 300 euros. Incluso el incivismo ha llegado al extremo que en uno de los parques han arrancado los letreros donde se prohibía el acceso a los canes".
En referencia a la arena o el caucho, es partidaria de la arena, ya que el caucho con el paso del tiempo y con el sol se deteriora y amortigua bastante menos.
La concesionaria del mantenimiento, también es la encargada de reponer la arena en los parques donde debido a su uso esta ha ido menguando. En referencia a las reuniones de jóvenes, la Policía Local, en estos momentos está realizando un estudio para saber en los lugares donde se reúnen y poder controlarlos.
