Las obras de la primera fase del Plan Director para la reforma y ampliación del Hospital de Manacor, que han comenzado por el servicio de Urgencias, plantean un serio problema de espacio para que tanto profesionales como pacientes y visitantes puedan estacionar sus vehículos. Es por ello que tanto la conselleria de Salud como el ayuntamiento de Manacor están intentando llegar a un acuerdo para replantear y poder adecuar a corto plazo una zona acotada.

El director del Servicio de Salud, Juli Fuster, acompañado por el secretario general, Manuel Palomino, y por la gerente del Hospital, Catalina Vadell, se han reunido con la alcaldesa de Manacor, Catalina Riera, y con la delegada de Urbanismo, Isabel Febrer. El objetivo es lograr un acuerdo entre ambas instituciones para poder habilitar un terreno (o varios) en torno al Hospital, para ocuparlos temporalmente como zona de estacionamiento, "o bien una alternativa similar, siempre pensando en el beneficio de los usuarios del Hospital de Manacor", sostienen desde el centro.

Con esta finalidad se han presentado diversas propuestas, que ahora deberán ser estudiadas por los respectivos servicios jurídicos, para después, convocar una segunda reunión para intentar hallar una solución definitiva.

Hay que recordar que, actualmente, el centro hospitalario dispone de un total de 400 plazas de aparcamiento, un número que se duplicará cuando se hayan construido los nuevos edificios del complejo y se hayan reformado los actuales.

Desde hace más de una década el Hospital de Manacor sufre un alarmante déficit de plazas para coches, lo que se ha agravado de forma evidente tras el inicio de la reforma del complejo sanitario. Eso ha provocado que la carretera posterior a la entrada principal, el Camí de Conies (Ma-3322), registre desde hace un mes un peligroso incremento de vehículos aparcados en los lados, lo que crea problemas de seguridad, al ser una zona rápida y sin pasos para peatones, con el consiguiente riesgo de accidentes.

Otros de los espacios perjudicados por el acopio de vehículos son tanto la gasolinera como la superficie comercial cercanas, que ven sus aparcamientos copados por coches que no son clientes suyos.

Por si fuera poco, hace aproximadamente un mes este periódico contabilizó hasta media docena de aparcacoches sin ningún tipo de licencia en el propio parking hospitalario. Está previsto que durante la segunda fase se construya un nuevo módulo en la zona del aparcamiento actual de 2.150 metros cuadrados. No será hasta la tercera cuando se edificará finalmente otro espacio, que además de dependencias tendrá dos plantas subterráneas dedicadas a aparcamiento, lo que podría acabar de una vez por todas con los problemas.