Un grupo de padres y madres de alumnos del colegio Jaume Fornaris i Taltavull de Son Serverase concentraron ayer a las 8,30 de la mañana para recoger firmas y exigir el arreglo de la calefacción, estropeada desde el pasado mes de noviembre, así como de las goteras aumentadas por las últimas semanas de lluvias. Poco después el alcalde Antoni Servera, aseguraba a este periódico que el tema de la calefacción ya estaba solventado de manera provisional con el arrancado manual de urgencia.
Los padres aseguraban que desde la dirección del centro se había reclamado por activa y por pasiva tanto a las autoridades locales (ayuntamiento de Son Servera) como a las autonómicas, (conselleria d'Educación e IBISEC) sin que nadie diera un solución al problema hasta ayer.
Este hecho había provocado que algunos alumnos acudieran desde noviembre a clase con ropa de invierno sin podérsela quitar en tiempo lectivo, o que algunos profesores impartiesen las clases de igual manera. Los padres aseguran que en el centro hay cinco profesores de baja y que el motivo han sido las frías temperaturas que tienen que aguantar durante su jornada laboral, a pesar de las mantas o ropas de abrigo con que algunos se ataviaban.
Falta de repuestos
El problema, según el primer edil, radicaba en la dificultad para encontrar repuestos de la caldera, ya que la empresa fabricante había quebrado y se ha tenido que recurrir a otros suministradores que fueran compatibles con la instalación. Por otro lado los padres advierten que si no se solventan estas deficiencias, continuarán realizando sus movilizaciones, sin descartar un plantón en la asistencia.
El edificio también presenta deficiencias estructurales que ocasionan goteras en varias clases, lo que obliga a los docentes a colocar cubos como medida de urgencia. El pasado día 2 de febrero la agrupación local de Esquerra Unida, solicitaba información al respecto mediante una instancia presentada en el registro municipal serverí, que según los responsable de la formación, a día de hoy aún no se ha contestado.
