El Ayuntamiento de Esporles ha denunciado que algunos vecinos no tiran la basura como toca. Según detalla el consistorio, el error más común es sacar la basura orgánica sin cubo. Esta práctica provoca suciedad en las calles, ya que los perros o gatos a menudo acuden al olor de los residuos y husmean las bolsas esparciendo su contenido. Según la normativa municipal, es imprescindible y obligatorio sacar la orgánica siempre con bolsas biodegradables y dentro del cubo marrón. Ambas cosas se proporcionan de forma gratuita en las oficinas municipales.

Otras incidencias que se han detectan han sido sacar la basura orgánica con bolsas de plástico convencionales o comerciales (no compostables) o no reciclar correctamente, incluyendo restos de envases, papel de aluminio, papel, ceniza u otros materiales en la basura orgánica.

A pesar de estas infracciones puntuales, Esporles obtiene a través de la venta de residuos unos beneficios económicos que rondan los 90.000 euros anuales. Desde el consistorio alaban el esfuerzo de los vecinos y destacan que las infracciones en la recogida de papel y cartón, y envases y vidrio es muy baja.

El municipio hace recogida selectiva de todas las fracciones de residuos desde el año 2009. “Los vecinos ya están acostumbrados y el nivel de sensibilización hacia el reciclaje es muy alto” declara la alcaldesa Maria Ramón. Durante los últimos años el índice de recogida selectiva se ha situado cercado del 75%. Ahora, el consistorio ha puesto en marcha un nuevo turno de inspección de residuos para revisar los residuos que sacan los vecinos.