Los excursionistas pudieron disfrutar ayer la primera nevada de la temporada en la cima del Puig Major. La nieve hizo acto de presencia de forma testimonial puesto que a las pocas horas ya se había fundido. La capa que se formó no llegó a un centímetro de espesor. La caída de los primeros copos estuvo precedida por un notable descenso de temperaturas en la Serra de Tramuntanta. La previsión es que, a partir de hoy, las temperaturas vuelvan a subir para situarse en valores habituales de esta época del año.