El pleno de Lloseta aprobó una propuesta de la alcaldía para solicitar al Consell que rebaje el nivel de protección patrimonial del Palau d'Aiamans y sus jardines. La propuesta del alcalde, Xema Muñoz, exhorta al departamento de Patrimonio del Consell de Mallorca a iniciar los trámites oportunos para se consideren Bien Catalogado (BC) en lugar de Bien de Interés Cultural (BIC).

La propuesta salió adelante a pesar de los votos fraccionados de los miembros del consistorio. Es tal la división, que del equipo de gobierno -actualmente formado por seis miembros: cuatro del PSOE y dos de Més- tres votaron en contra. Fueron los dos ediles de Més (Joan Servera y Angelina Pérez) y una concejala del PSOE (Antònia Massanet).

El representante de El Pi y exalcalde de Lloseta, Tolo Moyá, voto en contra de la propuesta alegando que no veía motivos para este cambio a "no ser que la propiedad quiera realizar una operación de venta tras estar liberada del BIC".

Joan Servera (Més), justificó su "voto negativo ya que -dijo- la empresa propietaria ni siquiera ha presentado un proyecto con las reformas que pretende hacer". El PP (Xisca Ramis) votó favorablemente aunque matizó que el conjunto del palacio y los jardines debe delimitarse correctamente y después incluirse en las normas subsidiarias. Recordó que si se mantiene la condición de BIC y no pasa a BC, el Ayuntamiento deja de percibir 50.000 euros anuales en concepto del IBI.

Las dos regidoras no adscritas (Francisca Campins y Marga Villalonga) votaron a favor explicando que "si la corporación no tiene poder adquisitivo para comprar el conjunto, se debe hacer algo para evitar el deterioro constante que sufre".

Socialistes Independents (Pepi González) que también votó en contra no ve claras "estas prisas para la descalificación a no ser que haya intereses soterrados".

Por último, el alcalde (Xema Muñoz) dijo que si se realizan mejoras en los inmuebles para dedicarlos a hostelería o algo parecido se puede beneficiar buena parte de la población de Lloseta.