El ayuntamiento de Mancor de la Vall descubrió hace varios días que el obispado de Mallorca registró a su nombre a mediados del año 2015 dos plazas urbanas de la localidad que la institución municipal consideraba como patrimonio del pueblo.

El alcalde Guillem Villalonga (Més per Mancor) admitió ayer que la inmatriculación de las dos plazas por parte de la Iglesia supuso una "sorpresa" porque el Ayuntamiento creía que ambos espacios urbanos eran de su propiedad.

El Consistorio iniciará ahora una investigación para averiguar a qué institución pertenecen las plazas. De hecho, está previsto que hoy se desplacen hasta el municipio de la Serra algunos representantes del servicio jurídico del obispado y también miembros de la parroquia de Mancor para tratar de determinar la propiedad o si existe algún antiguo convenio que establezca la cesión del uso de las plazas a favor del pueblo 'mancorí'.

"De momento no tenemos nada claro si estas plazas habían pertenecido a la iglesia o bien de una forma u otra se cedieron al Ayuntamiento; no lo encontramos en los archivos", añadió el regidor de Mancor.

En este sentido, Villalonga apunta que "si realmente se demuestra que ambos espacios eran de la iglesia, ningún problema, pero si no es así realizaremos los pasos oportunos para recuperar las plazas".

Las plazas están ubicadas en los dos laterales de la parroquia de Mancor. En el registro de la propiedad de Inca ya figuran a nombre de la iglesia. Una de ellas tiene 742 metros cuadrados y la otra 690 metros cuadrados.

Placas conmemorativas

Se da la circunstancia de que las dos plazas exhiben sendas placas conmemorativas de la inaguración de estos espacios (una en 1993 y la otra en 1999) en las que se especifica claramente que la habilitación de los dos espacios había sido posible gracias a la "donación de los terrenos al pueblo", en uno de los casos, y "gracias a la donación de la parroquia", en el otro. En una de las plazas antiguamente había viviendas para sacerdotes que fueron derribadas para habilitar un nuevo espacio público.

No obstante, el Ayuntamiento no tiene constancia de la existencia de ningún convenio que regulase esta donación en los años 90.

Hasta la fecha, el consistorio de Mancor de la Vall ha tratado estos dos espacios urbanos al igual que el resto de propiedades municipales, realizando la limpieza viaria y ejecutando obras de mantenimiento cuando es necesario. "En principio seguiremos igual porque queremos esperar a saber la propiedad de las plazas; si finalmente se confirma que pertenecen a la iglesia el Ayuntamiento dejará de realizar actuaciones en estas zonas", explicó Villalonga.

El alcalde añadió que, sea de quien sea la propiedad, "no habrá problema" para llegar a acuerdos con la parroquia para que estos espacios sigan siendo usados por el pueblo como hasta la fecha, al igual que ocurre con el campo de fútbol, que es propiedad de la parroquia y pasó a ser de uso público gracias a un acuerdo en los 80.