"Remediar el problema del agua está en manos del Govern balear, el Ayuntamiento ha realizado diferentes propuestas pero no se han tenido en cuenta". Así de directo se manifiesta el alcalde de Santanyí, Llorenç Galmés (PP).

El reciente capítulo vivido en es Llombards, con una polémica nota de dudosa validez legal remitida por la suministradora a los vecinos, advirtiendo de que el agua no es apta para el consumo humano, noticia publicada por Diario de Mallorca esta semana, ha provocado la reacción del consistorio santanyiner.

Galmés subraya "los esfuerzos" para corregir la problemática del abastecimiento de agua en todo el municipio y en concreto en es Llombards. En 2015, el Ayuntamiento puso en marcha el Pla de gestió de la demanda dels recursos hídrics en el terme para ordenar y planificar las actuaciones dirigidas a mejorar el suministro de agua y avanzar hacia un uso sostenible de tan esencial recurso.

Entre las iniciativas contempladas sobresale la interconexión de redes de suministro en el municipio. Se está finalizando la redacción del proyecto y la tramitación de los pertinentes permisos para emprender la primera fase. En es Llombards se desea disponer de un pozo apto para el abastecimiento humano. A su vez se anuncia un depósito de unos 100 m3 "para asegurar el abastecimiento de toda la población de es Llombards en caso de necesidad o avería". El coste asciende a unos 500.000 euros y el periodo de ejecución, en torno a un año.

Por otro lado, el consistorio mantiene que en innumerables ocasiones ha pedido al Govern la necesaria llegada de agua a la comarca del Migjorn, ya sea con el proyecto de red de distribución en alta aprobado por el mismo Govern (prevé la llegada de agua de calidad desde sa Costera) o permitiendo la instalación de una desaladora. Dicha propuesta de una planta piloto potabilizadora no ha recibido respuesta favorable del Ejecutivo autonómico.