Varios operarios instalaron ayer los andamios precisos que servirán para que a partir de hoy se lleven a cabo las tareas de retirada la cruz que culmina el monumento a los Caídos de Sóller. La noticia ha suscitado numerosas opiniones al respecto, aunque la mayoría son favorables a lo que el PP calificó ayer de "atentado contra el patrimonio y la historia".

Con el "descabezado" de los Caídos; es decir, la retirada de la cruz, el pacto de izquierdas dará cumplimiento a un acuerdo de pleno que en enero de 2016 supuso la retirada de todos los elementos de índole o exaltación franquistaelementos de índole o exaltación franquista que todavía quedaban en el municipio. El cambio se impulsó apelando a la Ley de Memoria Histórica que prohíbe la exhibición de simbología fascista o falangista y la exaltación de la dictadura.

Cuando la polémica parecía que había pasado, desde ayer lunes ha arreciado, especialmente en las redes sociales con numerosas críticas de ciudadanos, después de que el gobierno municipal haya decidido retirar la cruz del monumento.

Desde la oposición, el exalcalde Carlos Simarro calificó la retirada del símbolo religioso como "un atentado contra el patrimonio y la historia de Sóller" y lamentó que el equipo de gobierno "quiera demostrar con eso que es más valiente que el del ayuntamiento de Palma con sa Feixina". Para el portavoz del principal partido de la oposición, "el descabezamiento del monumento es una barbaridad" fruto de "un gobierno municipal formado por dictadores que solo representan a una minoría". Simarro se preguntaba ayer "con qué autoridad el gobierno municipal puede destrozar un monumento que ya no es franquista".

El monumento ya fue modificado, en agosto del año pasado, con el fin de adaptarlo a lo que acordó el pleno municipal no sin polémica tanto en la sala de plenos como en la calle. De acuerdo con lo acordado, el ayuntamiento acomodó el monumento a la Ley de Memoria Histórica.

Para lograrlo se suprimieron el escudo y la inscripción relativa a los "caídos por Dios y por la Patria".

Concentración

Para esta mañana se ha convocado una concentración de vecinos frente a los Caídos de la plaza de España para reivindicar que no se retire la cruz que culmina el monumento diseñado por el arquitecto Gabriel Alomar.

En su día Arca emitió un informe en contra de la retirada del monumento al considerar su valor como obra arquitectónica, por encima de la ideología política. Dice la entidad que probablemente sea una de las primeras obras del arquitecto y que fue planteado "como si de la fachada de un templo griego se tratase, magníficamente trabajado sobre una escalinata de la que se levantan unas columnas cuadradas que soportan un dentellón con una inscripción".