Las serpientes habían tenido hasta ahora un aspecto casi amable y anecdótico en Mallorca. Las autóctonas de la isla son diminutas, huidizas y su escasez creciente las ha convertido en motivo de curiosidad y excepcionalidad. Sin embargo, la aparición y rápida expansión de la culebra de herradura, lo trastoca todo. Su tamaño y comportamiento nada tienen que ver con el concepto de serpiente inofensiva y propia de la isla. No es venenosa, pero sí agresiva y de dimensiones que pueden aproximarse a los dos metros. Hay quien se la ha encontrado refugiada en la despensa, con todo lo que ello comporta.
La serpiente de herradura se arrastra ya, literalmente, como una plaga más de las invasiones vegetales y animales que castigan y desvirtúan esta Mallorca sin fronteras ni aduanas de protección sobre lo autóctono y natural. La culebra en cuestión ha hallado en esta isla un clima que no le obliga a invernar y buenas provisiones. Así se comprende que hay mutado y se haya adaptado con rapidez y comodidad en detrimento de otros reptiles y pájaros que tienen su hábitat natural en Balears. Los cazadores de Maria de la Salut han capturado unas 60.
Los entendidos ya dan su erradicación por imposible y dudan que las medidas de control que se van aplicando sean eficaces. Cunde un cierto temor ante lo desconocido y potencialmente peligroso frente al cual los alcaldes reaccionan demandando un asesoramiento que no tiene respuestas claras. Hay mejor voluntad que eficacia. Los cazadores colocan jaulas trampa con la esperanza de cobrar unas piezas que nunca han deseado perseguir.
La culebra de herradura va ganando terreno y refugio en Mallorca porque el control de plagas y la catalogación y protección de especies autóctonas de la isla también esta a ras de suelo. Aquí, la vista permanece fijada solo en los paneles de los récords de turistas. Por eso mismo la serpiente en cuestión también es una delatora. Tiene mucho de chivata de olvidos y de lo mal que se han hecho las cosas. El castigo es quedar expuestos cualquier día en cualquier lugar al sobresalto y la mordedura de una serpiente.
