El primer domingo después del día del Corpus, en Pollença se celebra la procesión con el baile de las Águilas y Sant Joan Pelós, el cual porta un cordero. Durante las dos horas que dura la procesión, el animal permanece inmovilizado con cuerdas dentro de una bolsa de plástico por si éste defeca, que no ensucie a quien interpreta al santo.

Alternativa considera que el animal sufre innecesariamente y por ello solicitó en el último pleno que se impida la presencia del cordero durante la procesión.