Con motivo de las obras de reforma del edificio principal del Ayuntamiento de Pollença en el año 2010 se trasladaron parte de los documentos del archivo municipal a la sacristía de la Iglesia de la Mare de Déu de Roser, que se encuentra situada en el antiguo claustro de Sant Domingo. Cuando se acabó la obra en el edificio consistorial se trasladaron de nuevo los documentos del archivo general y del archivo de urbanismo a las oficinas municipales. No obstante, muchos de estos documentos no se devolvieron a su lugar, quedando acumulados dentro de cajas en dicha sacristía.

Hace un mes Alternativa per Pollença, en la oposición municipal, interpeló durante el pleno municipal sobre el cuidado y destino que tendrían dichos documentos. Pere Josep Coll, edil de Alternativa sostiene que "a día de hoy no nos han contestado aún y consideramos que no es el lugar más adecuado para albergar documentos confidenciales".

Miquel Àngel Sureda, teniente de alcalde, sostiene que "lo que se encuentra almacenado en la sacristía es parte del archivo administrativo: los documentos más antiguos, porque los más recientes se devolvieron; y también algunos documentos del archivo histórico". Según el responsable: "Los documentos históricos se reubicarán en su propio archivo -ubicado en el casal de can Llobera- pero deberemos esperar un tiempo mientras se hacen trabajos de digitalización de lo catalogado y se les hace sitio".

Sin embargo, alternativa denuncia que la iglesia del Roser es un lugar poco seguro. "Algunas de las cajas que contienen los documentos están abiertas. En este momento dicha documentación, se encuentra al alcance del personal no funcionario, y en ocasiones incluso, al alcance de personas ajenas al Ayuntamiento, y que se puedan encontrar allá montante ferias, festivales u otros acontecimientos, con el evidente riesgo de pérdida o deterioro de los documentos", apunta Coll.

Para evitar que estos documentos se pierdan, "en último pleno pedimos que se buscara un lugar más adecuado donde guardar la documentación. No obtuvimos ninguna respuesta", reitera.

El edil recuerda al equipo de gobierno que "toda la documentación producida por las administraciones locales tiene categoría de patrimonio documental, y que el Ayuntamiento tiene la obligación de conservar debidamente ordenados los documentos de los archivos públicos".