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Son Servera

El caso del misterioso cadáver arrojado al contenedor

Un concejal se puso en contacto con ella al ver la publicación en 'facebook' y fue hasta el lugar

Imagen del contenedor de Cala Millor donde fue hallado el cuerpo.

A veces hay que prestar atención a todos y cada uno de los detalles para resolver un enigma. Este martes, un post colgado en las redes sociales llamaba la atención de los vecinos de Son Servera y hacía saltar todas las alarmas. Alguien había visto como dos policías locales arrojaban un cuerpo de una persona sin vida en un contenedor de basura cercano a la comisaría de Cala Millor.

Un concejal de la oposición, Antoni Cánovas del partido ON Son Servera, al percatarse de los hechos narrados por la vecina, se pone en contacto con la autora de la publicación, la cual le confirma lo escrito. Es entonces cuando el regidor la persuade para que retire el post, cosa que, tras unos minutos, hace. Cánovas intenta tranquilizarla asegurando que aquello debe tener una explicación lógica.

Para estar más seguro él mismo acude al lugar de los hechos para comprobar si realmente existe tal contenedor. Ahí está. "Al abrir apenas unos 25 centímetros el recipiente, vi en la penumbra (eran alrededor de las 23 horas) a una persona vestida con pantalones largos blancos, tal y como me había descrito la mujer... en ese momento (explica el regidor), se me vino el mundo abajo, me asusté mucho y ante los hechos decidí llamar a la Guardia Civil".

Intenta primero desplazarse al cuartel de Cala Millor, pero está cerrado. Está tan nervioso que llama por equivocación al 061; "Allí me aclararon que era el 062 y repetí la llamada". Aún en estado shock, el concejal explica a los agentes lo que le han contado y lo que él mismo ha visto con sus propios ojos dentro del contenedor. Los agentes, según el regidor, le piden que de inmediato llame al 112 y comunique los hechos.

Es el momento se activa todo el protocolo de seguridad: Varios agentes acompañados de una ambulancia se desplazan hasta el lugar de los hechos. Con sigilo, se procede en paralelo, a la revisión del contenedor de basura y a la intervención del camión de recogida. La sorpresa salta cuando ni en un lugar ni en otro queda rastro alguno del cuerpo. Se ha desvanecido misteriosamente en medio de la noche.

Es en ese momento en que la historia da otro giro de tuerca... Mientras habla con el 112, Cánovas es informado de que se trata de un maniquí y no de una persona. "Me sentí muy aliviado y llamé enseguida a la vecina que me había dado la información para comunicárselo y que se quedara tan tranquila como yo".

Aunque la difusión social del presunto caso se produjo este martes, en realidad el caso tuvo su comienzo el pasado fin de semana, cuando alguien arrojó el maniquí en un solar cercano, supuestamente de una casa vecina afectada por un embargo y de la cual se habían visto camiones retirando enseres.

Dos policías locales del turno de mañana se percataron de la presencia del maniquí arrojado junto a la calle, y, supuestamente para evitar sustos mayores, decidieron recogerlo y lanzarlo al contenedor de basura. Fue el preciso momento en que la vecina pasaba por una calle cercana y observó aterrada la escena, al confundir el maniquí con una persona. Poco después decidió relatarlo en Facebook.

Pero es que además el maniquí tiene su propia historia. Se trata de una famosa figura que ya era conocida en la década de los ochenta en Cala Millor, cuando estaba colocada en un conocido bar de clientela suiza, igual que si de un guiri más se tratara. Los rocambolescos hechos ya han suscitado todo tipo de historias de humor en el pueblo. El protagonista de la historia ya es conocido como el guiri guirique fue de marcha a Cala Millor y apareció en un contenedor de basura. Mal final para el cuerpo del famoso maniquí que después de las épocas doradas ha tenido que acabar su vida útil desahuciado en un camión de basura.

Pero la Policía Local continúa sus diligencias y ayer al mediodía la persona que escribió el post en Facebook era llamada a declarar en la comisaría de Cala Millor al tiempo que se iniciaba la correspondiente denuncia al concejal de ON para ser remitida a Fiscalía.

Fuentes del cuerpo local de Son Servera ya han mostrado su malestar ante la actuación del regidor, un colectivo que dice sentirse acosado por las actuaciones de dicho político. Aseguran recibir quejas constantes de él, denuncias de lo que el concejal considera mal comportamiento circulatorio de las patrullas, lo que está elevando el nivel de crispación de los miembros del cuerpo serverí.

Mientras, Cánovas ha expresado su alegría de que la historia fuera tan solo un mal entendido, asegurando que su impresión al levantar la tapa del contenedor le trastornó pensando que podía tratarse de una persona humana. "Realmente así lo pensé, por eso llamé a la Guardia Civil, a pesar de que con el estado de nervios que padecía no daba con el número. En cuanto a la Policía Local, el concejal se declara admirador por el buen servicio que llevan a cabo, y matiza que sus críticas siempre van encaminadas a mejorar el servicio que prestan y no a crear ninguna tensión.

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