El financiero Juan March Ordinas mantendrá la condición de Hijo Ilustre de su municipio natal. El equipo de gobierno PP-El Pi hizo valer su mayoría para rechazar la moción presentada por la izquierda local en la que se reclamaba la revocación de la distinción honorífica otorgada en 1956 e instaba a la corporación a condenar el golpe de Estado franquista de 1936 y a reconocer la labor de los 'margalidans' que lucharon por la democracia.

Monjo centró sus argumentos en destacar la labor social realizada por March en Santa Margalida y no entró a valorar el levantamiento militar de Franco, que Suma no quiso desvincular del resto de puntos de la moción. Así, pues, el golpe franquista no fue condenado por ninguno de los dos partidos gobernantes, una decisión que, según Suma pel Canvi, les deja "retratados".

La moción solo fue apoyada por la coalición progresista, mientras que Can Picafort Unit optó por la abstención porque, según su portavoz Nofre Plomer, su grupo estaba de acuerdo con la revocación de la distinción a March pero no quería entrar en el debate sobre el golpe de Estado.

El debate plenario giró alrededor de la figura de 'Verga' y su relación con el municipio 'margalidà'. Suma pel Canvi argumentó su moción en los aspectos más controvertidos del financiero, como su actividad contrabandista, su vinculación directa con el golpe de Estado financiando el avión que trasladó a Franco hasta el norte de África, la compra de material bélico para el bando nacional y la sospecha de los 'margalidans' de la participación de March en el asesinato del 'vilero' Rafel Garau, una acusación popular nunca probada que alejó para siempre al magnate de su municipio natal. La coalición reiteró que la declaración de March como Hijo Ilustre incumple la Ley de Memoria Histórica.

"Imaginación perversa"

El alcalde Joan Monjo replicó que el incumplimiento de la Ley de Memoria Histórica está solo en la "perversa imaginacion" de la izquierda y destacó que March cedió un local de Palma a los trabajadores y aglutinó a formaciones de izquierdas en el partido 'verguista'. También negó que fuese encarcelado por corrupción, sino por "motivos políticos" porque no quiso ayudar económicamente a Azaña y Prieto.

Basándose en un informe encargado expresamente para destacar las labores positivas de March en la Vila, el regidor añadió que "no hay ninguna prueba" de la participación de March en el asesinato de Garau y cuestionó la afirmación de Suma de que March no era bien visto en Santa Margalida. "En junio de 1931 la corporación felicitó a March por su onomástica de forma efusiva".

También abundó en la amistad entre March y el intelectual 'vilero' Joan Mascaró i Fornés, que "no pensaba, como vosotros, que March era un bandido y eso que le conocía mejor que nadie". Subrayó que la Fundación March realizó actividades positivas para Santa Margalida a nivel cultural, artístico y social, entre las que destaca la construcción de la Escola Graduada.

El PP solo participó en el debate para decir que su desea era que "todo quede como está", en palabras de su portavoz Martí Torres.