El departamento de Territorio e Infraestructuras del Consell de Mallorca anunció ayer que modificará el proyecto de la tercera fase de la carretera Llucmajor-s'Estanyol. Ayer, pleno de la Comissió de Medi Ambient de les Illes Balears, se optó por retirar el punto que debía tratar la mejora de dicha vía puesto que el Consell realizará cambios a fin de adaptar el proyecto a las peticiones de la comisión, vinculada al Govern.

Diario de Mallorca adelantó, en su edición del pasado martes, que los técnicos de Medio Ambiente se oponen al plan previsto por su excesivo impacto. En esta línea, tachan las obras de "sobredimensionadas", advirtiendo de que pueden afectar gravemente a las zonas LIC y ZEPA.

La intención actual del Consell es "mejorar la última fase que queda por realizar de la carretera. Ésta comienza en el núcleo urbano de s'Estanyol y llega hasta la intersección con la carretera Ma-6014. En total son 3,9 kilómetros y se trata de un tramo peligroso por el que pasa un gran número de ciclistas".

La propuesta "pasaba por tener dos carriles, un por cada sentido, de 3,5 metros de ancho y dos arcenes de 1,8 para mejorar la seguridad de los ciclistas".

Ahora el departamento de Territorio e Infraestructuras estudiará las alternativas posibles, teniendo en cuenta las observaciones medioambientales.

En concreto, los técnicos avisan de que el proyecto que se pretendía desarrollar afecta a suelo clasificado como Red Natura 2000, LIC, ZEPA, ANEI y Suelo Rústico General-Forestal. Según ellos, se ponen en riesgo hábitats existentes, determinadsa plantas, tortugas y aves. La ampliada ZEPA podría verse, de hecho, perjudicada por la desproporcionada obra.