La séptima edición de la Pujada al Molí des Castellet, celebrada ayer por la mañana pese a la amenaza de lluvia, volvió a reivindicar la conservación de este molino de viento harinero, un bien catalogado por el Ayuntamiento.

Al final del recorrido, la portavoz de la plataforma ProMolí des Castellet, Maria Avellà, señaló que, ya hace un año, se dio a conocer el compromiso de que la finca se abriría los domingos, lo que no ha sido así.

Según detalló Avellà, esa apertura la pactaron en una reunión el concejal delegado de zona, Andreu Serra (PSOE), y representantes de la propiedad. La portavoz de la plataforma señaló que el edil de Calvià vila le ha asegurado que volverá a insistir en esa demanda. En lo que se refiere a la conservación del Molí des Castellet, Avellà lamentó que la restauración que se emprendió hace un par de años haya quedado "a medias". "El molino sigue sin la cubierta. Y se hizo un porche sin respetar las técnicas constructivas tradicionales", argumentó ante los participantes en la marcha reivindicativa. En esta ocasión, la pujada transcurrió sin ningún tipo de incidentes, a diferencia de lo que sucedió en alguna edición anterior, como la de 2014, cuando los excursionistas se quedaron atrapados en el interior de la finca, porque alguien cerró la barrera de acceso cuando estaban dentro de la propiedad.