El ayuntamiento de Sóller acogerá la próxima semana una reunión a tres bandas entre el equipo de gobierno, hoteleros y constructores con el fin de intentar alcanzar un acuerdo para modificar la ordenanza municipal sobre ruidos y vibraciones. La norma fue aprobada inicialmente la semana pasada por el pleno de la corporación, aunque el alcalde Jaume Servera admitió que será modificada con el fin de conciliar los intereses de ambos sectores económicos.

Un representante de la asociación de hoteleros de Sóller, Lluís Rullan, apeló al "sentido común" para que la norma sea modificada con el fin de establecer limitaciones en la emisión de ruidos de la construcción durante los meses de verano. El texto aprobado establece que la maquinaria podrá funcionar entre las 9 y las 13 horas de la mañana y entre las 15 y las 18 horas de la tarde. En opinión de los hoteleros este abanico de horarios es "excesivo" y aboga para que el ayuntamiento lo reduzca. A la patronal hotelera tampoco le agrada que se puedan hacer ruidos incluso los sábados por la mañana, tal y como prevé la norma. También piden que la ordenanza articule un listado de herramientas cuyo uso esté prohibido durante los meses de verano. En opinión de la patronal que engloba a los empresarios turísticos del valle, lo ideal sería que Sóller estableciera una ordenanza similar a la que está en vigor en Andratx, que establece una franja horaria de trabajo con ruidos que abarca de las 10 hasta las 15 horas de lunes a viernes.