Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La 'joya de la corona' de la empresa municipal

En 2010, los sindicatos y la oposición socialista se manifestaron contra la privatización del servicio

Porque lo público es servicio y lo privado es beneficio. ¡No a la privatización de Calvià 2000!. Éste era el lema de una de las pancartas de la manifestación que se convocó en 2010 contra la externalización del servicio de agua potable, una medida que tanto los sindicatos como la oposición socialista de aquel entonces consideraban perjudicial para la principal empresa municipal de Calvià.

El suministro de agua, subrayaban, era la "joya de la corona" de la compañía, un filón de beneficios que equilibraba la cuenta de resultados del resto de departamentos de Calvià 2000.

La polémica arrancó en la segunda legislatura del alcalde Carlos Delgado (PP). El Ayuntamiento decidió ceder, mediante un sistema de concesión administrativa, la gestión del agua que venía prestando Calvià 2000 en todos los núcleos del término menos en Peguera, Santa Ponça, Costa de la Calma y El Toro.

La empresa Sorea (Hidrobal, en Balears) se hizo con el concurso, que valoró especialmente el el canon inicial que ofrecían los licitantes. En este caso, Hidrobal ofreció 20,2 millones de euros.

La adjudicación se hizo por un periodo de 50 años. No sólo eso. Según establecían las bases del concurso, la empresa ganadora tiene la posibilidad de asumir las otras concesiones de agua del municipio a medida que éstas vayan expirando.

Compartir el artículo

stats