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Entrevista

Joan Parets i Serra: "Un cura debería pasar por misiones para saber desarrollar mejor su labor pastoral"

"Estando en Perú tuve la oportunidad de conocer a miembros del grupo Sendero Luminoso"

Mossén Joan Parets atiende la entrevista sentado sonriente ante la puerta del tempo parroquial de Campanet. Joan Pons

Joan Parets es un sacerdote jubilado, pero que enamorado de su ministerio, no lo abandona todavía. Nos recibe a las puertas de la parroquia de Campanet.

-¿Qué hace un cura jubilado al frente de una parroquia?

-Pensaba que una vez llegada la jubilación, a los 75 años, alguien me diría algo por la edad. Pero no ha sido así, además creo que mientras un cura pueda servir a una parroquia debe hacerlo. Si bien en algunas ocasiones no debe asumir según qué tipo de responsabilidades.

Fijáos como en Francia hay curas de bastante edad, superior a la mía, como el recientemente asesinado, que continúan sirviendo a la comunidad.

-¿Hay otros sacerdotes en su situación en Mallorca?

-Sí, por ejemplo Ricard Janer, prior de Lluc, y Baltasar Amengual, que durante años ha continuado sirviendo a parroquias de la zona del Llevant de Mallorca hasta que ahora, este invierno, pasará a residir en la residencia sacerdotal para jubilados de Palma.¿En qué parroquias de Mallorca ha estado?

Mi primer destino fue Bunyola, de donde tengo buenos recuerdos de mi juventud, así como de las otras parroquias en las cuales he desarrollado mi labor como cura; como la de Sant Josep Obrer (Palma) Lloseta, Crist Rei (Inca), Sineu y ahora desde hace ya bastantes años en Campanet y Moscari.

-Durante unos años estuvo en misiones ¿Por qué decidió ir?

-Porque creo que es una experiencia que uno debe realizar y debe prestar ese servicio. Mi estancia se debe en gran parte a mi a mi hermano Miquel (recientemente fallecido en Perú) que era aquellos años auxiliar de misiones.

-¿Cuál fue su labor en misiones?

-Más que de misionero, mi labor fue de gestor ya que en los años que estuve en Perú eran diversos los mallorquines que servían en aquellos lugares. Yo me encargaba un poco de la coordinación entre todos. Mi labor pastoral fue más bien acompañar a los demás mallorquines ya que me nombraron el delegado de los cien mallorquines que en aquellos momentos había en Perú.

-¿En qué parroquia trabajó?

-En la parroquia San Juan Maria Viney junto a Pere Fons, que era quien marcaba la línea misionera y quien más contacto tenía con los nativos. Yo me sumaba a sus decisiones ya que tuve que encargarme de otras labores."Mi hermano era muy valiente y no temía afrontar situaciones por duras que fueran"

-¿Porqué Perú y no otro lugar?

-Lo que me hizo decidir ir a Perú, a los 40 años, y no a otros lugares misioneros fue la lengua. Ahora bien, el motivo es que creo que un cura debe conocer no sólo su tierra si no realidades de pueblos diferentes para poder desarrollar mucho mejor la labor pastoral, que en Mallorca también debería ser de un misionero.

-¿Cuál es su mejor recuerdo de aquella estancia?

-Haber recorrido todas aquellas tierras y ver la realidad de aquel pueblo y tierras. Tuve la oportunidad de conocer a miembros de Sendero Luminoso.

-¿Cómo considera a esa organización?

-En aquellos momentos era gente de buena fe; la mayoría de ellos gente formada como maestros, que desarrollaron una determinada labor pero poco a poco se fue deteriorando, y con el paso de los años será algo que uno deberá de analizar con profundidad, ya que entró la droga. Piensa que a día de hoy muchos permanecen en la cárcel. Mi hermano Miquel últimamente estuvo en contacto con muchos de ellos en la cárcel.

-¿Hace poco que murió su hermano Miquel cómo lo consideraba?

-Para toda la familia era muy respectado ya que era el mayor de los hermanos. Era una persona muy sencilla pero que resultaba difícil en ocasiones trabajar con él ya que actuaba sin miedo ante cualquier acontecimiento.

-¿Cómo trabajó su hermano en tierra de misiones?

-El lugar donde se consagró como misionero fue en Burundi. Sobre todo cuando hubo enfrentamientos entre dos etnias. Allí realizó una gran labor misionera al declarar ante los tribunales que determinaron su expulsión del país. Lo consideraron persona non grata y tuvo que irse ya que la condición que puso para declarar fue hacerlo con la lengua nativa el Kirundi. Ello no sentó bien al Tribunal. De ahí pasó a Perú.

-¿Qué labor realizó su hermano en el Perú?

-Estuvo en un seminario de Cajamarca, paso luego a trabajar en los Andes, donde por motivos de salud tuvo que dejar de visitar a esas comunidades, y de ahí fue integrándose en el trabajo de las cárceles. Los últimos años estuvo trabajando en la cárcel donde estaban los de Sendero Luminoso.

-¿Le apreciaban en Perú?

-En los tres grandes penales que él trabajó durante los últimos años de su vida lo apreciaban muchísimo -se emociona y le resulta difícil responder- Es suficiente decir que su despedida se produjo en uno esos penales, con discursos por parte de los mismos presos. Lo apreciaban ya que el era un defensor suyo ante cualquier injusticia. No tenía miedo a enfrentarse a cualquier responsable del penal si lo consideraba justo.

-¿Qué recuerdo les queda a usted y sus familiares de la muerte de su hermano?

-Los discursos y los escritos que desde tierras peruanas y de los propios presos nos han hecho llegar. Con ello se demuestra el aprecio que le tenían.

-¿Cómo son esos penales?

-Lógicamente duros. Tuve la ocasión de visitar alguno de ellos, con él, y yo tenía prisa de acabar la visita. Mientras que para él era lo normal. Era muy respetado tanto para los presos como por los dirigentes de los mismos.

-Usted es una persona muy relacionada con el mundo musical¿Cómo valora la música?

-Valoro que a partir de una jornada con motivo del año internacional de la música descubrí la importancia que tenía ser documentalista musical, ya que noté a faltar que en Mallorca se estaban quedando en el olvido muchas temas relacionados con la música. De ahí que junto con Pere Estelrich y Biel Massot decidimos empezar a recoger materiales y todo lo relacionado con la música, para empezar a crear un fondo .

De ahí nació el Centre de Recerca Musical de Mallorca, que a día de hoy se encuentra depositado en can Cirera Prim (sa Pobla), compartiéndolo con la fundación ACA.

"La sibil·la debería interpretarla el mejor cantante de cada pueblo: Tomeu Peña en Vilafranca"

-¿En un futuro quién debe hacerse cargo de la conservación de este material?

-Lo más lógico es que sea el Consell de Mallorca, ya que forma parte del Centre, y así asegurar su conservación y continuar con esta labor. De no ser así hay una cláusula en los estatutos que inducen a que sea la iglesia quien se haga cargo de ello.

-¿Se implica el Consell?

-Sí. Siempre hay un representante del Consell en las decisiones que se toman.

-¿Tiene Mallorca fondo musical?

-Sí. Había familias que tenían en sus propios domicilios documentos musicales de familiares, que al saber de la creación de este centro decidieron aportarlo a fin de concentrarlo todo en un mismo lugar y así poder asegurar su conservación. Lo que ha posibilitado su catalogación y facilitar la investigación, para aquellos que se interesan por la musicología.

-¿Quién debe cantar la Sibil·la en nuestras parroquias?

-En el caso de la sibil·la se debería encargar a la mejor voz de cada localidad. Lo que no puede ser es que sea una persona, en muchas ocasiones niño o niña, que tenga un miedo tremendo a interpretarla por si se equivoca. Por ejemplo en Villafranca debería cantarla en Tomeu Penya.

-¿Debe cantarse solamente en Mallorca?

-No. Piense que ya en tiempos antiguos, durante el siglo Xlll y XlV se interpretaba en diversas catedrales tanto en España como en el sur de Francia.

-¿Musicalmente cómo ve Mallorca?

-Actualmente bien ya que prácticamente en todas las localidades hay grupos musicales, algo que hace unos años era impensable. Hay corales, xeremiers, bandas de música, batucadas, escuelas de música, además de músicos que únicamente se dedican esa tarea.

Todo hay que valorarlo positivamente, ya que lo importante es que se haga música.

-¿Cuándo un cura se vuelve mayor que es lo que más desea?

-No estar solo. Por eso creo que hasta que uno pueda debe tener algo en que entretenerse, y tener alguna inquietud. Por ejemplo a mí me interesa continuar con la búsqueda musical; me da vida.

-¿La diócesis está preparada para atender a los curas jubilados?

-Sí. Hay la residencia del obispado que en estos momentos está al completo, pero dentro de unos años, con los pocos sacerdotes que somos, no habrá problema.

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