"El raor casa bien todo. Es un pez rico y las posibilidades culinarias son múltiples". Así se expresaron ayer numerosos pescadores recreativos consultados por Diario de Mallorca. La veda se abrió con fortuna diversa.
Un año más, las principales zonas que vivieron la tradicional ´fiebre´ de la búsqueda y captura del raor (Xyrichthys novacula) fueron Cap Salines (ses Salines-Santanyí), Badia d´Alcúdia, Cala Bona-s´Illot y área marítima entre Estellencs y Andratx, entre otras.
Centenares de pescadores, la inmensa mayoría recreativos, ansiosos de degustar el preciado pez de atractivos rosa y azul.
Preguntados por cómo se los iban a comer sugirieron diversas opciones: "Raors amb tumbet: vuelta y vuelta en la paella, enharinados o no, acompañado de patatas, berenjenas y pebre vermell", "fritos con patatas y prebes", "fritos y combinados con pebres vermells, patata y calabacín", "torrats", "con trempó", "añadiéndolos encima de un arròs de peix", "fritos y con prebes, patata y salsita" o "hervidos y, por supuesto, un buen caldo".
La conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Govern balear informó de que la campaña de pesca estará activa hasta el 31 de marzo. La cantidad por licencia y día es de unas 50 unidades, con un máximo de 300 por embarcación. "Sólo dos o tres embarcaciones por isla se dedican profesionalmente a la pesca del raor", detalló. Un famoso manjar de lo más caro en los mercados.
