Tomeu Fullana (dama), Joan Albert Cerdà, Miquel Miralles, Tomeu Rafel Ginard, Toni Miralles Niell, Toni Bergas y Toni Miralles Martorell fueron los cossiers que ayer tarde, junto al dimoni y la colla de xeremiers i fablioler, recorrieron las calles de Montuïri. Centenares de visitantes vivieron ayer -un año más- la salida de los cossiers en el dia de sa Revetla, la víspera del patrón Sant Bartomeu. Aunque la jornada "cayera en día laborable", no fue óbice para que personas venidas de todos los puntos de la isla se desplazaran para ver in situ la segunda de las tres únicas actuaciones anuales de los cossiers.

A las seis y media de la tarde, la multitud congregada en la plaza Major esperó la llegada del dimoni, que, como es habitual, nunca lo hace desde el mismo sitio. Su objetivo es "sorprender" a los jóvenes que le fustigan con sus gritos de Banya Verda e iniciar, luego, las escaramuzas. Fue la primera escapada en pos de ellos, la primera persecución con su barrota i llandera.

Momentos después, comenzó Flor de Murta, el baile por antonomasia de los cossiers en el catafalco ubicado frente a la casa consistorial.

Siguió el acompañamiento que los dansaires hacen a las autoridades religiosas hasta el templo para el canto de la completas, la veneración de la imagen de Sant Bartomeu y el reparto de los ramilletes de alfabeguera (albahaca) a los asistentes. A continuación, multitudinario recorrido urbano, con bailes y esprintades. Hoy, miércoles, nueva irrupción.