Montuïri sigue siendo uno de los municipios más endeudados de Mallorca. El déficit acumulado durante los últimos 20 años ha lastrado de tal manera su economía que en actualidad cada vecino debe aún 2.000 euros. Por eso el Ayuntamiento ha confeccionado un plan de tesorería para conocer cuáles son las entradas y salidas de cada mes y qué cantidad debe destinarse para disminuirlo.
El Plan de Viabilidad Económica iniciado por el equipo de gobierno de Més hace un año con el fin de liquidar el pasivo de las dos últimas décadas, ha situado la deuda consistorial en 5.793.811,22 euros, lo que supone una reducción de 199.688,13 euros en un año. Los créditos a bancos, que ascienden a 4.474.687,12 euros representan la cima más alta que el consistorio debe coronar para enjuagar los elevados números rojos. Es el gran reto de Més, que tras las pasadas elecciones reemplazó al Partido Popular tras 28 años de mandato conservador.
Los otros apartados se refieren a proveedores (557.597,80 euros), convenios y sentencias pendientes (468.083,98) y a otros organismos tales como la Mancomunitat des Pla, Seguridad Social y Hacienda (293.442,32 euros). "Es una prioridad ponernos al día con estos dos últimos estamentos", ha indicado el alcalde Joan Verger. "Desde que nos incorporamos como equipo de gobierno, estamos al día en cuanto a las cuotas anuales de la Seguridad Social. El pasado año le pagamos 183.420,36 euros entre cuotas y deudas y este año ya llevamos 151.199,50".
En cuanto al IRPF, apunta que "hemos llegado a un acuerdo con Hacienda para regularizar los pagos. De ahí que, además de satisfacer los 25.000 euros trimestrales en concepto de cuotas normales, cada mes devolvemos 5.000 euros para disminuir el déficit del que ya queda escaso remanente". En estos dos campos, las arcas municipales han sufrido el hándicap de los recargos por impagos anteriores y por no haber recibido determinadas subvenciones al no encontrarse al corriente de los pagos.
Funcionarios al día
"Uno de los puntos destacados de nuestra labor (continúa explicando el primer edil) es el abono de las nóminas de los empleados municipales. Anteriormente estos cobraban la mitad de su salario a mes vencido y una semana después, la otra mitad. Actualmente, toda la plantilla cobra puntualmente desde el segundo mes de la actual legislatura".
Asimismo y según fuentes del ministerio de Hacienda, el ayuntamiento de Montuïri es el sexto del Estado que más días tarda en pagar a sus proveedores. En el ránking figuraba por detrás de dos municipios de Galicia, uno de Lleida, uno de Girona y un quinto de la Comunidad Valenciana. La media montuïrera hasta la fecha era de 408 días de retraso.
La autoauditoría que el nuevo Ayuntamiento ha efectuado detalla que existen facturas pendientes desde 2002 y que el mayor montante se halla en los años comprendidos entre 2011 y 2015. Desde junio de 2015 (fecha de incorporación del actual equipo de gobierno) la reducción más significativa ha sido con los proveedores, que alcanza la cantidad de 93.602,59 euros. Se refiere al período comprendido entre año 2002 y 2015, si bien "ello ha obligado a aumentar un poco la deuda con los bancos".
Verger afirma que "nuestro objetivo es pagar, aunque debemos ser conscientes de que tenemos pocos ingresos. Hablamos con los proveedores y llegamos a acuerdos puntuales. Conocemos nuestra grave situación. Hemos liquidado la mayoría de facturas pequeñas (menores de 500 euros) e intentamos un equilibrio entre los pagos de las nuevas y las atrasadas".
Las inversiones se han reducido al mínimo. "Solamente gastamos en lo que es útil y necesario. No haremos ecomuseos", subraya el alcalde de Montuïri. Como ejemplo de inversiones necesarias enumera el asfaltado de caminos y el arreglo de pluviales en el campo de fútbol gracias a los 255.148,11 euros que distribuyó el Consell a los ayuntamientos a través del Plan Especial Sostenible.
En la distribución del Fondo de Cooperación Local, el Govern ha destinado 75.057 euros. Servirán para mejoras calles y para la reducción energética de la zona deportiva y adecuación del alumbrado vial.
