-En el reportaje publicado por Diario de Mallorca el pasado mes de enero estábamos a la espera de lo que había pasado con la boya que se había colocado en la zona del paralelo 81 en el Océano Ártico. ¿La boya volvió a emitir información o no?
-Sí, la boya está ALIVE (viva) como dicen en los mensajes. El pasado 29 de abril volvimos a recibir noticias de SI06 que es el código de la boya del paralelo 81. Normalmente a partir del paralelo 80 estaríamos en zona de hielos permanentes y el banco de hielo escogido como 'campo de hielo' tenía un espesor de tres metros pero al dejar de recibir información durante meses nos hizo pensar en lo peor. Podía ser que algún oso polar se hubiera encaprichado de nuestra boya. Por suerte contábamos con la protección extra de nuestro ca de Sant Roc (pegatina identificativa de Porreres) que sin ninguna duda lo mantuvo alejado.
-¿Hasta cuándo está previsto que el proyecto esté en funcionamiento?
-El proyecto SATICE (Satélite+ hielo) está englobado dentro del proyecto ICE-ARC (Ice, climate, economics-Arctic, research on change) que es como se denomina, tiene previsto el despliegue de boyas hasta el verano de 2017 y se mantendrá mientras haya boyas enviando datos, aunque su fecha oficial de finalización es el 31 de diciembre de 2017.
-¿Cómo fue la experiencia de trabajar durante unas semanas con temperaturas bajo cero?
-Al ser verano, las condiciones climatológicas fueron buenas, similares a las de un invierno normal en el Pirineo, de hecho un par de días nos nevó, sabia, por Skype que en Mallorca hacía mucha calor por lo que en aquel momento me consideraba un privilegiado. Mucho más extraño para mí fue el que no hubiera noches, vivir en un día permanente es toda una experiencia que hace que tengas que mirar el reloj para saber en qué hora vives.“Es urgente un replanteamiento global de la investigación, favoreciendo los contactos”
-¿Cuál fue la tarea más difícil?-La comida. El barco coreano, Araon, en el que estuvimos embarcados, es un rompehielos técnicamente muy avanzado y con todas las comodidades, pero la comida coreana es muy picante y se convirtió en la 'tarea más dificultosa'. Bromas aparte, la adaptación a las medidas de seguridad fue quizás la tarea de más dificultad ya que el Ártico es un ambiente muy hostil y cualquier imprevisto puede tener consecuencias muy serias.
-Cambiemos de tercio. A un ingeniero con más de 30 años de experiencia diseñando prototipos, ¿aún le sorprenden las invenciones de los científicos?
-Con los años, la capacidad de sorpresa es cada vez más limitada pero sí que hay 'inventos' realmente sorprendentes, sobre todo a nivel de posicionamiento mediante satélites, lo que llamamos normalmente GPS. Los científicos tienen necesidades que los ingenieros intentamos solucionar, mientras no incumplamos ningún principio de la física todo es posible si tenemos un buen talonario... el problema radica muchas veces en buscar soluciones del tipo bueno, bonito, barato y además rápido.
-¿Cuál ha sido el proyecto que más le ha llamado la atención, o en el que más se ha tenido que involucrar durante estos 30 años?
-Lo que más me ha llamado la atención fue el diseño de un laboratorio de ensayos para la mejora de la seguridad de cochecitos de bebé, para diferentes marcas nacionales y una alemana. Para ello tuvimos que diseñar y construir las máquinas de ensayos, inicialmente ignoraba todo el protocolo de pruebas que deben pasar los cochecitos y que son muy duras.
-¿Cuál sería el proyecto en el que le gustaría trabajar y aún los científicos no lo han inventado?
-El proyecto en el que me gustaría trabajar ya está inventado y es todo lo que hace referencia a las estaciones espaciales, crear una ciudad en el espacio sería un sueño, pero me temo que hemos llegado tarde, quizás en otra vida...
-En diciembre estábamos hablando del simulador de seísmos 'roboquake' en el que la Escola d'Enginyers de Terrassa estaba trabajando. ¿Ya está finalizado? ¿Se han colocado en algún sitio de nuestro planeta? ¿Se ha podido comprobar su eficacia?
-El roboquake, o simulador de terremotos, está instalado en el Campus de Terrassa y se halla en fase de pruebas, el principio físico sobre el que trabaja es la detección vía satélite del movimiento de una antena gps de alta definición durante un terremoto. La recepción y procesado de datos se realizaría en tiempo real y sería una herramienta potentísima para el aviso inmediato de peligro de tsunami en las posibles zonas próximas al seísmo.
-Estamos viviendo una época de fuerte sequía, donde pueblos de Mallorca ya están sufriendo restricciones. Como ingeniero, ¿ha trabajado en algún proyecto para poder ayudar en una mejor utilización de los recursos hídricos de nuestra zona mediterránea? ¿La Escola d'Enginyers ha recibido alguna solicitud de alguna institución para trabajar sobre el tema?
-No es mi especialidad, pero entiendo que el problema del agua potable es muy grave. Técnicamente puede obtenerse agua potable a partir de agua del mar mediante el sistema de osmosis inversa, en lo que llamamos 'desaladoras', el problema principal reside en el alto consumo de energía que requiere y en Mallorca la energía se genera en su totalidad a partir de combustibles fósiles. En Mallorca necesitamos agua para muchísima gente, la demanda de tanta gente, sobre todo en verano, es enorme y puede agotar el agua del subsuelo que en los años de sequía no puede reponerse. Considero básico iniciar una campaña de concienciación de las personas, empresas e instituciones en cuanto al consumo responsable de un bien tan escaso y tan necesario para mantener la industria turística, motor principal de la economía balear, si dejamos de derrochar agua para usos innecesarios dispondremos de más agua para todos.
-¿Cómo ve las inversiones en el tema de investigación, tanto a nivel nacional como en nuestra comunidad?
-Desconozco el nivel de inversión en las Illes Balears pero imagino que estará como en el resto de España, es decir, a merced de los recortes habidos. De todas formas, el problema es muy complejo, hay que potenciar la inversión en investigación pero de dicha inversión debe haber un retorno a la sociedad que ha financiado dicha investigación, este planteamiento se está imponiendo en los proyectos europeos. Es urgente un replanteamiento global de la investigación favoreciendo el contacto entre empresas y centros de investigación, y una vez creado este caldo de cultivo aumentar la inversión hasta los niveles europeos.
-¿Cómo ve el tema de que muchos jóvenes tras finalizar sus estudios tengan de partir para poder poner en práctica sus aprendizajes?
-El hecho de partir en sí no es malo, al contrario, lo malo es que tengan que hacerlo obligados porque aquí no hay trabajo. Yo mismo animo a mis estudiantes a buscarse la vida donde sea para no perder comba, si cuando acabas una carrera no ejerces, los conocimientos se pierden y las siguientes generaciones de titulados te pasan delante, son más jóvenes y sus conocimientos son más recientes, por lo que son escogidos por las empresas antes que los titulados mayores pero que llevan un tiempo en paro forzoso por falta de trabajo. Actualmente tengo alumnos trabajando en Alemania, en Porsche hay un mallorquín, en Lamborgini, etc. Y están muy valorados, sobre todo en tareas de I+D+I (investigación + desarrollo+innovación) por su creatividad, fruto de nuestro carácter latino.
-Aterricemos en Porreres. ¿Cómo recuerda las fiestas de Sant Roc cuando era un niño y residía en Porreres?
-Siempre he sido más bien tímido y las aglomeraciones de gente no me gustaban pero a partir de una cierta edad era una magnifica opción de conocer amigos y amigas que no podíamos desperdiciar... De pequeño me aterraban los cabezudos que por aquel entonces nos perseguían garrote en mano pero en cambio no me perdía ninguna de las carreras pedestres en las que competíamos junto con mi hermano pequeño, que era quien solía ganar casi siempre.
-¿En qué han cambiado?
-Cada época tiene sus cosas, lo importante es que la gente participe y se haga las fiestas suyas, no hay que programar las fiestas para el pueblo sino con el pueblo.
-¿Cuál es la imagen que le ha quedado grabada de aquellas fiestas y que cada año por estas fechas vuelve a su memoria?
-Me encantaban las carreras a pie donde el premio consistía en una gallina colgada por sus patas de una caña que se llevaba el primero que llegaba. Realmente deberíamos de sustituir la pobre gallina por otra cosa pero en aquel tiempo no se veía mal.
-Como buen 'porrerenc', con el 'albercoc' de Porreres, ¿ya se ha probado todo o el ingeniero, con 30 años de experiencia, tiene alguna idea que podría aplicarse a nuestro tan preciado fruto?
-La experiencia del sequer tal y como la conocíamos era una experiencia de vida extraordinaria, allí se trabajaba en equipo para la obtención de un objetivo común. En la universidad y en las escuelas se potencia el trabajo en equipo como competencia transversal, en el sequer era nuestro pan de cada día, además, salías de tu casa y conocías gente de tu edad con los que tenías relación real, muy lejos de lo que conocen nuestros hijos actualmente inmersos en un mundo virtual lleno de 'amigos' en Facebook a los que nunca conocerás realmente. Como lo que tenemos que buscar no es la cantidad sino la calidad, el sequer yo lo dejaría tal y como ha existido toda la vida, potenciando el hecho de que sea una actividad artesanal de calidad e involucrando, nuestras autoridades sabrán buscar la manera de hacerlo, a nuestros jóvenes para que conozcan en primera persona 'real' lo que es el trabajo en el campo.
-Cuando desde la regiduría de Cultura se pusieron en contacto con usted para solicitarle que pronunciase el pregón de las fiestas de este año, ¿cómo se sintió? ¿cuál fue su primera reacción?
-Una mezcla de ilusión y de preocupación por estar a la altura de la situación, ser pregonero es un honor muy importante. Primero pensé en declinar el ofrecimiento pero con esta actitud no se llega a ningún sitio así que aquí estamos.
“La experiencia del ‘sequer’ era una experiencia de vida extraordinaria, allí se trabajaba en equipo”
-¿Podría anticiparnos algunos de los temas que va a tratar en dicho pregón?
-Hablaré de los posibles cambios en nuestras vidas como consecuencia de un cambio en el clima que hoy tenemos y de pequeñas acciones individuales que pueden ayudar a su reducción. Un cambio en el clima no implica que no se pueda vivir en una Tierra más caliente, simplemente que las condiciones de vida serán diferentes a las que tenemos hoy en día y que cambiarán nuestros hábitos de vida. La Tierra ya ha pasado por largas etapas de temperaturas más elevadas que las actuales y esto beneficia a unas especies y perjudica a otras pero hasta ahora estos cambios tenían su origen en acciones naturales. Esta vez parece ser que la actividad vital humana es la principal acción provocadora del cambio climático debido a la alta generación de gases de efecto invernadero, (CO2, metano y óxidos de nitrógeno), siendo el CO2 el gas que más generamos fruto de la combustión de los derivados del petróleo. Para reducir nuestro impacto sobre el cambio climático podemos realizar pequeños cambios en nuestro día a día, la suma de muchas pequeñas acciones puede invertir la tendencia actual al reducir nuestra generación de CO2.
