El pleno ordinario celebrado ayer en Calvià aprobó por unanimidad una propuesta de Esquerra Oberta mediante la que se propone al Ayuntamiento la realización de una auditoría global externa de los contratos y concesiones del Consistorio y de sus empresas, tanto en lo referido a su proceso de adjudicación como en lo relativo al grado de cumplimiento de los pliegos y ofertas. Todos los grupos políticos pactaron que la auditoría abarcará los últimos diez años de gestión municipal y se centrará en el análisis de la gestión del agua potable, la ejecución de los contratos de recaudación y el contrato de las playas.

La moción también compromete al Consistorio a publicar los resultados de la auditoría y a crear una comisión para vigilar el cumplimiento de los pliegos de las contrataciones.

Esquerra Oberta justificó la necesidad de auditar los contratos por si se aprecian irregularidades en las adjudicaciones, ya que "la política de privatizaciones que ha aplicado el Ayuntamiento en las últimas legislaturas ha hecho que buena parte de los servicios que reciben los vecinos corresponda a empresas privadas".

Por otra parte, el pleno rechazó otra propuesta del mismo grupo a favor de unos presupuestos participativos para el año 2017.