El primer pollo de águila marina (Milvus milvus) ha nacido esta primavera en el Parque Natural de Mondragó desde que se declaró espacio natural protegido, en 1992.

Se trata de una pareja que el año pasado ya había nidificado, pero que no había conseguido criar.

Con la colaboración del Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (GOB) y del Servicio de Agentes de Medio Ambiente, y con el apoyo material de Endesa, el pollo ha sido anillado (con marca de lectura a distancia) y equipado con un emisor de seguimiento por satélite, que permitirá hacer el seguimiento y obtener información sobre el uso que haga del territorio.

El águila marina fue declarada especie en peligro de extinción el año 2003. Por ese motivo, la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca redactó y aprobó el año 2008 un plan de recuperación que perseguía el objetivo de recuperar las poblaciones de esta especie en Balears hasta situarlas fuera de peligro, reduciendo la mortalidad, tanto adulta como inmadura, y asegurando superficies extensas de hábitats de calidad.

El águila marina había sido muy común en toda la isla de Mallorca, pero en las últimas décadas la población de este pájaro había sufrido un grave descenso provocado por motivos diversos, como son la desaparición de hábitats adecuados, la electrocución en líneas eléctricas y sobre todo el envenenamiento.