El ayuntamiento de Sóller afrontará la creación de un plan integral de protección para el barrio de Santa Catalina, en el Port de Sóller, con el fin de que evite perder el carácter tradicional y residencial que viene teniendo.

El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Sóller, Jaume Mateu, se ha comprometido con los vecinos a evitar la proliferación de más terrazas de bares y restaurantes en la zona y a elaborar un plan de protección para que este espacio eminentemente residencial pueda seguir manteniendo su carácter tradicional. Fue durante la semana pasada, en el transcurso de la asamblea vecinal cuando un grupo de vecinos quiso transmitir al equipo de gobierno municipal su preocupación porque "con el paso de los años la barriada más antigua y tradicional del Puerto perdiera su carácter de siempre".

La concejala de Participación Ciudadana, Laura Celià, explicó que las principales quejas expresadas por los vecinos durante la reunión de barrio hicieron referencia a la proliferación de terrazas de bares y restaurantes y en la dificultad de transitar con normalidad.

Según Celià, "personalmente pienso que la gente que siempre ha vivido allí es la que tiene que ir delante", pero a la vez ha justificado que "no podemos impedir legalmente que alguien abra allí un negocio, como cualquier otra zona del municipio si realiza los trámites oportunos".

Para Celià "la línea es muy fina" y recuerda que "hay quien ha preferido vender la casa y hay quien ha preferido habitarla", en referencia a la gran cantidad de viviendas de Santa Catalina que actualmente están dedicadas al alquiler turístico y que también han transformado la barriada.

Ocupación

La concejal argumenta que el Ayuntamiento tiene la potestad de regular la ocupación de la vía pública y se muestra dispuesta a ampliar los espacios de paso de los peatones.

Para el concejal Jaume Mateu la solución pasa inexorablemente por una revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y por el establecimiento de medidas de protección integrales del barrio que establezcan los usos que se pueden permitir en él. A su vez cree que se puede mejorar el control del ACIRE para evitar tanta presión en las calles de Santa Catalina.