Un año más, el puerto de Alcúdia fue el escenario en la noche del pasado viernes de la multitudinaria fiesta que organizan los alumnos de hasta 18 centros escolares de las comarcas del Nord, el Pla y el Raiguer para celebrar la proximidad del final de curso.

La fiesta transcurrió sin incidentes destacables, a excepción de diversos casos de jóvenes intoxicados por la ingesta de alcohol, y del presunto robo del bolso a una joven que ayer todavía se estaba investigando por parte de la Policía Local.

El Instituto de Seguridad Pública de Balears había organizado un amplio dispositivo policial para garantizar la seguridad de los jóvenes participantes. El despliegue contó con la asistencia de hasta siete policías tutores que en todo momento vigilaron de cerca a los estudiantes de sus respectivas comarcas. Además, la Policía Local de Alcúdia también activó varias patrullas para coordinar las tareas de vigilancia.

La fiesta se inició sobre las nueve de la noche, cuando los jóvenes se concentraron en la zona de restaurantes de la Avinguda Pere Mas i Reus para cenar. Posteriormente se desplazaron hasta el área donde se ubican los bares y discotecas de la Avenida Tucán. Como es habitual, muchos de ellos se fueron a la playa para practicar el botellón.