El alcalde de Vilafranca, Montserrat Rosselló, del Partit per al Poble (PxP), tildó ayer de "poco hombre" al regidor de Més Sere Salord, durante el pleno solicitado por la oposición para debatir sobre el pésimo estado del césped artificial del campo de fútbol es Molí Nou.

Salord lamentó que se hiciera referencia a su homosexualidad en el tenso debate: "No tenías ninguna necesidad. Me has hecho mucho daño". La discusión (que puede verse a través del vídeo colgado en la web del diario) se descontroló por la crispación en el ambiente y la intervención de otro concejal de la formación mayoritaria, antiguo PP.

La bronca dialéctica tenía sus orígenes en un pleno anterior en el que Sere Salord reclamó respeto, tanto desde el gobierno como la oposición, hacia la diversidad ideológica del pueblo, tras un supuesto encontronazo entre Rosselló y un joven que se había presentado en las listas de Més. Justo al iniciarse el pleno de ayer, Rosselló preguntó a Salord si había contrastado su información, contactado con testigos para conocer la realidad de lo que sucedió. La discusión fue subiendo de tono y un policía presenció el inesperado rifirrafe.

Més e Independents-Esquerra presentaron una moción en la sesión extraordinaria que incluía dos puntos: "Acordar la solicitud en el Pla d'Obres i Serveis del Consell para 2016 de las obras de restitución del césped artificial del campo de fútbol es Molí Nou" y "pedir al Consell que acelere la redacción del proyecto". El edil de Independents-Esquerra abandonó la sala, calificando antes de "patética" en varias ocasiones la actitud de Rosselló.

Según la oposición, que logró aprobar la moción ya que PxP se abstuvo, los campos con césped artificial tienen una vida limitada, una serie de años, pero el problema radica en que ni PP ni PxP han dado prioridad a su correcto mantenimiento, "con conciertos como el de Magán". Se teme por graves lesiones e incluso abandonos de competiciones en la próxima temporada.

PxP defendió su gestión, aportó su propio texto y anunció que en 2017 habrá nuevo césped artificial, "habiendo dado los pasos así como es debido". Se prevén otras mejoras complementarias y una inversión de unos 250.000 euros.

A su vez, Rosselló criticó de nuevo el sobrecoste del pabellón (promovido cuando gobernaba el PSM) y desveló que Melchor Mascaró "reclama ahora casi 300.000 euros porque el consistorio en 2010 no pagó dentro de plazo unas facturas".