Ayer se inauguró la muestra gastronómica de la Fira de la Sípia de Alcúdia en medio de la polémica desatada por los pescadores que sostienen que no el producto que se sirve es en gran medida foráneo. Un total de 22 restauradores ofrecen desde anoche y hasta mañana sus propuestas en la carpa instalada en la plaza de sa Quarentena. En dicho lugar sólo se sirven platos elaborados a base de sepia, pero que según los pescadores locales mucha de ella proviene de Sudamérica o África
El alcalde de Alcúdia, Antoni Mir, aseguró ayer desconocer el malestar del sector pesquero local. "A mí no me ha llegado ninguna queja", sostiene de forma tajante. El responsable municipal agrega: "Yo no sé donde han comprado la sepia los restauradores".
Organización
No obstante, el Ayuntamiento de Alcúdia es el organizador de de la feria. El alcalde sostiene que "lo lógico es promocionar el producto local, y con esa finalidad se hace, pero yo no sé si la sepia de aquí basta, ni soy quien para decirles a los hosteleros a quien han de comprar como no les digo a los pescadores donde han de comprar las redes".
El alcalde agrega que "los pescadores han pedido autorización para montar una carpa y van a cocinar sepia; como es lógico se les ha dado permiso y en cierta forma significa una competencia para los restauradores".
Mir acaba diciendo: "Lo que no puedo hacer, como representante municipal, es dar una solución a un problema que no se me ha planteado. No quiero buscar culpables sino soluciones".
El presidente de la Cofradía de Pescadores Sant Pere de Alcúdia, Gabriel Payeras, manifiesta que "el Ayuntamiento conoce las quejas de los pescadores. No sé si directamente el alcalde, pero sí responsables de la organización, y saben que la mayoría de sepia que se servirá en la muestra no es ni siquiera mallorquina". Payeras asegura: "Nosotros vamos a montar nuestra propia feria y daremos sepia mallorquina porque lo que queremos es que el consumidor conozca nuestro producto, no hacer negocio inmediato. Queremos sembrar para recoger después, algo que parece que los restauradores no han entendido".
La lonja se ha ofrecido para que el año próximo exista una negociación previa, y unos precios de promoción, para que la sepia sea efectivamente mallorquina. El alcalde asegura aceptar la propuesta y sentar a todas las partes el año próximo.
