A las 10 de la mañana de ayer salía de la parroquia una réplica de la Virgen de Lloseta ya que la auténtica, una talla románica del siglo XII - XIII, permanece en el camerino del templo parroquial. La procesión que se dirigió al oratorio del Cocó acompañada del grupo de xeremiers local, miembros de la escuela de bailes de Estel del Cocó, clero y autoridades. Una vez en la explanada del oratorio se inició una misa que presidió Pere Gerard Bestard, de Lloseta, y rector de la parroquia de Muro.