El Club de Caçadors Lupino de Llubí se ha convertido en sociedad de cazadores sin ánimo de lucro al haberse efectuado el traspaso de los estatutos de la entidad del registro de deportes al de asociaciones.

Durante 35 años la Societat de Caçadors Lupino ha sido un club deportivo, con unos estatutos que poco o nada tienen que ver con la caza. Al dar el paso al frente y pasar a regirse por la Ley Orgánica 1/2002, de 22 de marzo, reguladora del Derecho de Asociación, por la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, y por la Ley de Caza Balear, se convierte en una sociedad de cazadores de forma real, tanto a efectos legales como prácticos

Entre los nuevos fines de la sociedad, inalcanzables desde la Ley del Deporte, figuran la conservación, uso sostenible, mejora y restauración del patrimonio natural y de la biodiversidad, y en particular de la fauna cinegética. Por lo tanto, también en entidad de custodia de territorio de primer nivel, con 2.363 hectáreas de acotado que conserva y pone en valor.

"La Societat de Caçadors Lupino está convencida que tras el cambio de registro será capaz de defender los intereses de la caza y los cazadores con honda tradición y calado cultural desde tiempos inmemoriales. Valores, que poco a poco se están perdiendo por razones ajenas al mundo cinegético. Por ello, todos los cazadores mallorquines, tienen que seguir luchando por una caza social, de amigos, de pueblo, sostenible y de calidad; apartándose de las filosofías que valoran al que caza más en menos tiempo", manifiesta Toni Perelló, presidente de la Societat de Caçadors Lupino de Llubí.