Desde hace tres años y organizado por los quintos de la localidad, Santa Maria representa las cuatro tentaciones de Sant Antoni, función en la que cuatro chicas interpretan a la lujuria, la avaricia, la gula y la soberbia.

El acto se celebrará hoy, cuando los protagonistas se dirigirán en comitiva a buscar a Feliu, nombre que recibe el demonio a modo de homenaje al vecino del pueblo que durante muchos años representó al dimoni en los foguerons de la calle Rosario hasta su fallecimiento. Las tentaciones recogen al demonio en el lugar de nacimiento de esta persona.

Posteriormente se dirigirán hasta la parroquia, de la que saldrá el Santo ante el cual efectuarán el baile de las cuatro tentaciones. Después recorrerán los bares del pueblo, donde volverán a interpretar el baile de las tentaciones. La fiesta finalizará en la plaza de la Vila con el último baile y el canto del argumento.