El censo de población de Calvià recupera tímidamente el pulso, después del parón que experimentó durante los años de la crisis económica. El último dato oficial conocido, que señala que en el municipio están empadronados 52.169 vecinos, implica un ligero aumento respecto al ejercicio anterior, cuando estaban registrados 51.419 habitantes.

El aumento porcentual en sí no es significativo, ya que apenas supone un incremento del 1,4%, pero emite una leve señal de cambio de tendencia tras años de marasmo demográfico. Desde el inicio de la crisis, nunca se había registrado un aumento de población parecido (750 vecinos más entre 2014 y 2015). En 2014, el censo se redujo, por ejemplo, en 1.824 habitantes, al pasar de 53.243 a 51.419 vecinos.

El último dato oficial (52.169), a fecha de uno de enero de 2015, ha sido remitido al Instituto Nacional de Estadística (INE), después de pasar por el trámite de uno de los últimos plenos municipales. Hasta la llegada de la crisis, el municipio sólo conocía una evolución alcista.

Desarrollo económico

Con el desarrollo turístico, y la inmigración que atrajo, la población se fue multiplicando. Calvià pasó de albergar poco más de 11.000 habitantes a finales de los setenta a 20.900 en el año 1991. A principios del siglo veintiuno, siguió una evolución imparable: en 2001, el censo alcanzaba los 41.221 inscritos. Y, en la primera década del siglo veintiuno, alcanzaba el techo de los 53.000 habitantes, ratificando a Calvià como el segundo municipio más poblado de Balears, sólo por detrás de Palma.

En la última década, sin embargo, la evolución alcista se interrumpió. Entre los años 2007 y 2008, el padrón apenas creció (pasó de 53.046 a 53.319 inscritos) y en 2009 se redujo ligeramente. En una de las últimas actualizaciones, la de 2014, el censo se aligeró considerablemente por las bajas de empadronados. La población bajó a los 51.419 vecinos, casi 2.000 menos que al inicio de la crisis. En 2015, ha habido un ligero aumento: 750 vecinos más.